Más diputados no siempre es sinónimo de trabajar más. Esta es una de las principales conclusiones que se extraen al analizar el número de intervenciones e iniciativas parlamentarias que han registrado, a lo largo del último mandato, los alicantinos con escaño en el Congreso. Mientras Compromís, con un único representante en esa cámara, cuenta con 1.422 registros entre solicitudes de informes, preguntas orales o escritas o participación en distintas comisiones, los dos diputados socialistas no superan el millar y los de Podemos presentan un pobre balance. Lo mismo ocurre en el flanco derecho. La actividad de los dos diputados de Cs se impone claramente a la de los populares pese a que cuentan con tres miembros más en el grupo con un total de cinco escaños. La legislatura, que arrancó en julio de 2016 y concluyó esta semana con su disolución el pasado martes, se cierra con dos claros ganadores sobre la actividad en clave alicantina: Compromís vence en la izquierda y Ciudadanos lo hace por la derecha.
Ignasi Candela, del partido de Mónica Oltra y aspirante a la reelección, se lleva el oro a la actividad más frenética. Presentó entre julio de 2016 y marzo de 2019 nada menos que 995 solicitudes de informes, 292 preguntas escritas y dos cuestiones orales. Además, intervino en 133 ocasiones. Sólo una diputada superó en ese último indicador a Candela. No es otra que la número uno de Ciudadanos por Alicante, Marta Martín, que también quiere seguir. Habló 172 veces más que Candela, que hizo 133 intervenciones frente a las 305 de la parlamentaria de Albert Rivera. Martín contó 691 registros que sumados a los 332 de su compañero de grupo José Cano permitió que el partido de Albert Rivera en la Cámara Baja fuera el más laborioso de los grupos de la derecha en la legislatura que ahora acaba de finalizar.
La formación naranja se queda a 400 solicitudes de los números del diputado de Compromís durante la última legislatura que, cabe recordar, pasará a la historia de la democracia española por ser la primera vez que se produjo una moción de censura contra el Gobierno. Así, en junio de 2018, los socialistas de Pedro Sánchez entraron a gobernar, gracias al apoyo de Podemos, Compromís y formaciones nacionalistas. Este hito, inédito hasta la fecha, también quedo reflejado en el ritmo de trabajo de los diputados alicantinos socialistas, Patricia Blanquer y Herick Campos. Su labor decreció notablemente con la llegada al poder de su partido. De hecho, Blanquer registró nada menos que 527 preguntas por escrito con Rajoy y pasó a 25 con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Algo similar sucede con la estadística de Herick Campos. Presentó 136 preguntas escritas en la última legislatura -menos que su compañera alicantina de bancada- de las cuales sólo 33 se contaron en la etapa socialista.
Con todo, cabe destacar que el número de movimientos contabilizados entre ambos parlamentarios del PSPV rozan el millar, el cuadruple que los de Podemos que, con el mismo número de escaños apenas alcanzaron 200 iniciativas. Ambos se quedan por debajo de los números del único diputado de la coalición de Mónica Oltra, que casi cuenta con 1.500 registros. Son precisamente los dos diputados podemitas por Alicante -Rita Bosaho y Txema Guijarro- los que presentan el balance más pobre. Sólo suman 231 registros de actividad durante algo más de dos años y medio. Entre las cuestiones realizadas por Bosaho llama la atención las preguntas sobre la política de facturación de la compañía aérea de bajo coste Ryanair, así como una supuesta agresión racista que se produjo en uno de sus vuelos. La parlamentaria morada también se interesó por asuntos de Guinea Ecuatorial, su país de origen, como la detención de un dibujante, entre otras cosas. Pobre balance de los morados.
Tampoco la labor de los parlamentarios populares es demasiado brillante. Pese a ser la formación con más diputados con cinco escaños en total -María Dolores Alba, Joaquín Albaladejo, Gerardo Camps, Loreto Cascales y José Manuel García Margallo- el PP, entre todos juntos, apenas rozó los 700 registros de actividad. No trabajan ni en el gobierno ni en la oposición. Precisamente el exministro sólo contó 36 movimientos entre intervenciones y preguntas. El índice más bajo de los 12 diputados alicantinos. Una de ellas, la única oral, se centró en Gibraltar mientras que inició la legislatura interesándose, por escrito, sobre la opinión del Gobierno sobre el uso de la bandera de España en una una obra teatral. Es especialmente pobre igualmente la labor del exconseller de Economía, Gerardo Camps, con poca capacidad de iniciativa sobre Alicante.
