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«La línea roja de Fabra es una decisión valiente y que comparto, pero produce injusticias»

Moragues, con el castillo de Santa Bárbara al fondo. JOSÉ NAVARRO

Infrafinanciados, con una deuda histórica superior a los 14.500 millones, con inversiones por debajo del peso de la Comunidad, ignorados por Cristóbal Montoro... ¿Tiene la sensación de que la Comunidad Valenciana molesta al Gobierno?

La contestación es no. Hay que poner en valor lo que ha hecho el Gobierno. La Comunidad tiene un déficit estructural financiero y social. Nuestros gastos financieros este año se sitúan en 1.200 millones de euros. Pues bien, gracias a las medidas del Gobierno de Mariano Rajoy el año que viene vamos a tener un ahorro de 1.000 millones de euros. Hay que agradecerle su esfuerzo. Es verdad que hace falta un cambio en el modelo de financiación para conseguir la total autonomía financiera. También es verdad que no hemos conseguido cambiarlo, pero sí me gustaría subrayar una cosa. Primero, la concienciación y la unanimidad del diagnóstico: la Comunidad tiene un problema con el sistema de financiación. Ahora, cuando se nos acusa de manirrotos, de despilfarro, de mala gestión, de falta de eficiencia, de deuda y de déficit, hemos conseguido que la gente sea consciente de que nuestro problema no es que actuemos de forma ineficiente, sino que es el modelo de financiación.

¿Y con eso se conforma? Una de las reivindicaciones de la Generalitat era que se aplicara la revisión del modelo de financiación con carácter retroactivo a 1 de enero de 2014. El Gobierno se negó. Y después reclamaron un mecanismo de nivelación de 1.000 millones que posiblemente tampoco llegará.

Hemos reclamado, reclamamos y seguiremos reclamando el cambio de modelo de financiación. El planteamiento del Gobierno es que ahora no puede aportar fondos adicionales a las comunidades. Lo que decimos es que seguiremos reclamando un cambio en el modelo, pero hemos conseguido una gran labor de preparación de ese cambio. Al final, a la gente en la calle le da igual la deuda, el déficit, el sistema de financiación, el presupuesto... Lo que quiere es que le vaya mejor a ellos. Y para que les vaya mejor tienes que pagar en tiempo y forma. Para eso sirve esa liquidez.

¿Por qué el ministro de Hacienda no recibe al presidente y a los empresarios?

Siempre es importante que se produzca esa reunión lo antes posible. No obstante, hay que hacer una precisión. El objetivo inicial de esa reunión ha decaído porque han pasado ya unos meses y los Presupuestos Generales del Estado de 2015 ya se han presentado. No obstante, esperamos que se produzca y no se dilate mucho en el tiempo.

Evidentemente, ha decaído ahora, no en verano, que era cuando se reclamó.

De todas maneras, nosotros hemos dicho que (Montoro) nos ha decepcionado, que no puede dar la espalda a un sector empresarial tan importante como el de la Comunidad Valenciana. Reconozco que en julio estaba con la reforma fiscal y con los Presupuestos, pero no obstante no puede dar la espalda a los empresarios y ha de producirse esa reunión.

¿Alberto Fabra será el candidato del PP en la Comunidad?

Esa decisión no depende de mí, pero mi opinión personal es que no hay debate. Nuestra percepción es que el candidato será Alberto Fabra porque lo contrario no tendría sentido. Llegó a la Generalitat en el momento más difícil de la historia, y con su trabajo, sentido común y sensatez tomó las riendas en un momento muy difícil político y económico. Tres años después va a dejar la Comunidad mejor de cómo la cogió. No hay debate. No nos planteamos otro escenario.

¿Ha dinamitado el PPCV con su línea roja?

La línea roja ha sido una decisión valiente por parte del presidente Fabra y yo la comparto. Adopta esta decisión en una situación atípica o anormal, en la que había muchos imputados en el grupo parlamentario popular (de las Cortes) y donde había una alarma social derivada de casos de corrupción que giraban alrededor de la Generalitat. Él ha querido escenificar una tolerancia cero contra la corrupción. Pero esa línea roja produce injusticias, porque gente de la que no tenemos ninguna duda de su honorabilidad, honestidad y buen trabajo, se ha tenido que prescindir de ella porque se quería trasladar una imagen al exterior de tolerancia cero contra la corrupción. Eso ha provocado casos, como por ejemplo el de mi secretario autonómico (Eusebio Monzó, imputado por un proyecto fallido de Calatrava en Castellón) que hemos tenido que prescindir de él pese que yo no dudo de su honestidad.

¿Cree que Sonia Castedo será la candidata del PP en 2015?

Se ha dicho de forma muy clara. En las candidaturas no va a ir ningún imputado. Es su línea roja y es notoria.

Si se le diera a usted la situación de Castedo, ¿habría dimitido?

(Silencio). En la política te pueden imputar por cuestiones administrativas... Yo siempre he dicho que los políticos tenemos que tener un plus de decoro y no puede haber ninguna duda sobre tu gestión. Aunque yo tuviese una imputación administrativa y supiese a ciencia cierta que no va a tener recorrido el proceso... me incomodaría mucho tener un puesto de responsabilidad política y vivir un proceso judicial abierto donde se dudase de mi inocencia y se trasladase una imagen que no sea estética y decorosa. A mí me incomodaría y mi decisión, no como si fuese alcalde de Alicante, sino como conseller, sería apartarme temporalmente y cuando se resolviese volver a política si así lo decidiese el partido.

¿Viven topos en el Palau?

No lo sé. Nosotros manejamos dinero público y tenemos obligación de informar a la ciudadanía en qué invertimos su dinero. Otra cosa es que haya filtraciones por los cauces no reglamentarios. Que se filtre información sensible cuanto menos genera inquietud. Es alarmante y criticable.

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