Aparcar en la playa del Portet de Moraira es, si no se acude a primerísima hora, toda una odisea. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) prohibió utilizar el barranco como aparcamiento. Era la gran bolsa de estacionamiento de este litoral. Este verano los coches aparcan en las calles que suben Portet arriba.

La concejalía de Urbanismo ha trabajado para lograr la cesión de un terreno situado en la calle Puerto Espindola. Los propietarios, tras las conversaciones mantenidas, han aceptado cederla para que se utilice como aparcamiento. Esta bolsa palia el gran déficit de plazas del Portet.

El consistorio ha desbrozado y limpiado la parcela para prepararla para su nuevo uso. Se han dejado las pinochas en el suelo, ya que así se evita que los coches levanten polvo.