La primera infraestructura turística que la borrasca Gloria se ha llevado para siempre es la pasarela de madera que el Ayuntamiento de Dénia colocó en 2010 en la playa de les Albaranes. Entonces gobernaban el PP y los independientes y utilizaron una subvención de 150.000 euros de la conselleria de Turismo para instalar sin permiso de Costas una tarima que arrancaba de la playa del Raset y llegaba hasta la playa de les Bassetes. La pasarela chafó las dunas. El organismo ministerial multó al consistorio con 75.000 euros.

Ahora el temporal Gloria ha destruido la pasarela. El ayuntamiento ha terminado de retirarla esta mañana. El alcalde, Vicent Grimalt, y el concejal de Playas, Pepe Domènec, ya han anunciado que no se volverá a reponer. El negro episodio de la pasarela acaba aquí. Gloria le ha hecho el trabajo al ayuntamiento. Tarde o temprano debía desmantelar ese "paseo" de madera que le ha salido al ayuntamiento por un ojo de la cara.