El Hércules de Planagumà saca músculo. El sábado firmó, ante el Lleida (0-1), su cuarta victoria a domicilio en cinco partidos y ese extraordinario rendimiento lejos de Alicante le ha permitido obtener una renta de siete puntos respecto al quinto clasificado. Sólo han transcurrido 10 jornadas de Liga y los blanquiazules ya han puesto la velocidad de crucero hacia la promoción. El objetivo prioritario es la primera plaza, pero para esa empresa también oposita con firmeza el filial del Villarreal, que ayer ganó con sufrimiento al Baleares (2-1), gracias a un doblete del nigeriano Samu Chimerenka, y los amarillos se sitúan sólo dos puntos por debajo de los blanquiazules.

El ritmo impuesto por el Hércules es tan alto que ya ha conseguido los mismos triunfos a domicilio que en toda la temporada pasada, tres de ellos ante equipos llamados a pelear por los puestos cabeceros como el Villarreal B (1-2), Cornellà (0-2) y Lleida (0-1). Los blanquiazules también ganaron en el áspero campo del Ebro (0-1) y, en el único encuentro lejos de Alicante que empataron (0-0), ante el Mestalla, merecieron también los tres puntos tras una extraordinaria segunda parte en la que desperdiciaron numerosas ocasiones.

«Cada partido es el último»

Planagumà afirma que no pierde el tiempo mirando la clasificación, pero sí resalta el «gran trabajo» realizado por sus jugadores en este inicio de Liga: «Hay que tener los pies en el suelo porque sólo se han disputado 10 jornadas, nosotros tenemos que seguir a lo nuestro, afrontando cada jornada como si fuera la última, independientemente de quién sea el rival o las circunstancias que rodeen a los partidos».

El técnico barcelonés del Hércules, que la pasada semana cumplió 38 años, insiste en la aportación de todos sus futbolistas, incluyendo a los que desempeñan un rol secundario: «Todos compiten, hay bajas y no se notan, ese es el valor real de lo que estamos consiguiendo. No hay que estar pendiente de los que se lesionan, sino de los que entran después de muchos meses sin jugar, como Álvaro Pérez, y hacen un partido buenísimo».

El conjunto alicantino no pudo contar en Lleida con tres titulares como Íñiguez, Emaná y Juanjo Nieto y, además, durante el encuentro pidieron el cambio Juli y Álvaro Pérez por diferentes molestias. Por último, Planagumá resalta las diferentes caras que el equipo alicantino muestra en función de lo que demanden los encuentros: «Estamos consiguiendo ser ese bloque camaleónico que tiene varios registros, es vertical, sabe mantener el balón, presionar, replegarse... Todo esto es muy fácil de decir, pero dificilísimo de hacer. Aún así, tengo claro que tenemos margen de mejora», insiste el preparador del Hércules.

Los blanquiazules volverán a jugar lejos de Alicante el próximo domingo (17.00) ya que visitan al Olot, en uno de los desplazamientos más largos de la temporada para el conjunto de Planagumà. El Hércules ha aprovechado estas dos jornadas seguidas como foráneos para resembrar el Rico Pérez con un césped más adecuado a las bajas temperaturas, lo que obliga a la plantilla a trabajar a diario en el estadio de atletismo.