Las sorpresas agradables se suceden en el Hércules. Al gesto de colaborar con la Cruz Roja para recaudar dinero en favor de los refugiados del conflicto sirio, ahora hay que sumar que va a contar con un equipo oficial de deportistas formados con algún tipo de discapacidad mental. El club alicantino quiso explicar ayer los detalles del acuerdo en una rueda de prensa que tuvo lugar a mediodía en el Rico Pérez. La nueva sección de la entidad ha sido bautizada con el nombre de Hércules Paralímpico. Los futbolistas que pasarán a formar parte de la plantilla blanquiazul serán personas con parálisis o lesión cerebral.
La presentación del Hércules Paralímpico corrió a cargo del presidente del club, Carlos Parodi, Antonio Ruescas, máximo responsable de COCEMFE (Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica) en Alicante; y Paloma Uriarte, directora técnica del equipo.
También, quisieron estar presentes en el acto varios de los trece jugadores que formarán parte del primer equipo del Hércules Paralímpico, entre los que se encuentran el ex internacional español Carlos Antón y el actual miembro de la selección española absoluta Sergio Clemente.
Según Uriarte, el club pionero fue el Rayo Ibense, que ahora milita en Tercera División, que en 2012 accedió a integrar por primera vez en su estructura a una serie de jugadores y técnicos con deficiencias cerebrales.
«El resto de equipos son asociaciones pero no están integrados en clubes», aclaró Uriarte, quien explicó que el Hércules Paralímpico surge de la necesidad de contar con un club que asuma una estructura superior a la del Rayo Ibense; como es también el caso del Levante de Primera División.
El Hércules Paralímpico cuenta con el apoyo del seleccionador nacional de fútbol absoluto, Vicente del Bosque, que el lunes estuvo con ellos en el estadio Rico Pérez al aprovechar la presentación del encuentro internacional entre España e Inglaterra que se disputará el 13 de noviembre en Alicante. Recordar que el ex entrenador del Real Madrid se ha mostrado sensible públicamente a todos estos temas, desde su hijo mediano nació con Síndrome de Down hace 26 años. Del Bosque ha reconocido, en más de una ocasiones, que le cambió la vida. Era técnico del Castilla cuando recibió la noticia. «Al principio lloramos mucho», confesó en una charla con Gemma Herrero publicada en el libro 39 historias solidarias alrededor del deporte. «Ahora cuando miro atrás pienso: qué gilipollas fuimos. Álvaro es feliz y pícaro, pero no sabe qué es la maldad», dijo. Sin duda, ayuda mucho que un personaje de su calado se involucre en normalizar una realidad tan presente en la sociedad y que el Hércules ha sabido acoger como es debido. Ahora falta que el apoyo tenga recorrido.
