Las obras del colector centro de aguas pluviales, paralizadas desde mayo de 2018, se han retomado una vez que la Conselleria de Medio Ambiente ha llevado a cabo las modificaciones presupuestarias necesarias para dotar, con una partida adicional de 125.000 euros, el contrato destinado a culminar el proyecto.
Los trabajos del último tramo de esta actuación, de unos 200 metros de longitud que discurrirán entre las calles Travessia y Emilio Castelar hasta su confluencia con Jaume II, se prolongarán por espacio de dos meses aunque, tal y como ha informado el concejal de Calidad Urbana, Francisco Javier Cantos, «al tratarse de la fase más complicada, por encontrarse en el centro histórico del municipio, es posible que aparezcan nuevos restos arqueológicos que ralenticen de nuevo la intervención».
90% de ejecución
Las diferentes actuaciones imprevistas que se tuvieron que acometer diez meses atrás, con intervenciones en las redes de telefonía y la conexión eléctrica, así como con el seguimiento de los hallazgos arqueológicos que fueron apareciendo en el transcurso de las mismas, agotaron el presupuesto de 1.400.000 euros por el que Conselleria adjudicó el proyecto. Circunstancias sobrevenidas por las que la actuación, que se encuentra realizada casi en un 90%, tuvo que pararse hasta que se ha podido retomar esta semana, después de que la Generalitat Valenciana haya completado todos los trámites destinados a la aprobación del nuevo proyecto y la ampliación del presupuesto inicial en otros 125.000 euros.
Interés municipal
Desde el gobierno local formado por UPyD y PP se ha explicado que el reinicio de la obra ha dependido de los plazos marcados por la Conselleria. «Sería incorrecto por nuestra parte -ha señalado Francisco Javier Cantos- paralizar la obra y perder la subvención pese a que políticamente, teniendo en cuenta las fechas en las que nos encontramos, es poco inteligente». Ha imperado en este caso el interés municipal frente al interés político. Además, el edil ha mostrado su satisfacción por que, una vez concluido el último tramo del colector, se pondrá fin a un problema histórico para Novelda como son las inundaciones de la zona centro en episodios de lluvias intensas y persistentes.
