«Viva San Agatángelo y viva el patrón de Elche». Estos son los vítores que ayer se lanzaron en innumerables ocasiones hacia la imagen de San Agatángelo, patrón de la ciudad, que ayer estuvo arropado por cientos de devotos que no quisieron perderse el cierre de las celebraciones en su honor, que comenzaron hace ya una semana con el pregón a cargo del exalcalde Manuel Rodríguez. Lo cierto es que festeros, así como el resto de la comitiva y miembros de la hermandad de San Agatángelo festejaron que hacía años que no se recordaba una procesión tan vistosa ya que el buen tiempo acompañó al no repetirse los capítulos de viento, lluvia y frío de otras ediciones. Por otro lado, al final se pudo poner remedio a los problemas de coordinación que se sucedieron el año pasado, cuando tuvieron que hacerse más parones de lo normal para que no coincidieran en el espacio la parte litúrgica y la festera, teniendo en cuenta que coincidía la procesión con el pasacalles de Moros y Cristianos con motivo del Mig Any.

Según indican desde la hermandad, finalmente acordaron con la asociación festera que las comparsas se adelantasen para evitar que se solapasen los actos, aunque algunos festeros, sin embargo, reseñaban que todavía falta que el paso de la imagen vaya un poco más rápido para dinamizar la procesión. Al margen de las opiniones, los sentimientos estuvieron divididos, ya que prácticamente coincidió en el tiempo el homenaje a los cargos salientes que realizaron los festeros junto a Santa María con el encuentro entre San Agatángelo y la imagen de la patrona en el puente de la Virgen. De hecho este último momento fue uno de los más esperados, sobre todo cuando los costaleros elevaron la imagen, se entonó el «Aromas ilicitanos» y la reina de las fiestas, Carolina Irles, colocó un ramo de flores blancas junto a la ornacina donde reposa la imagen de la virgen en el puente. Después los vivas hacia ambos patrones emocionaron a una numerosa comitiva formada por 600 festeros de todas las comisiones de la Gestora de Festejos Populares y de la Unió de Festers del Camp d'Elx, además de representantes de entidades como la Casa de Andalucía, el centro Aragonés, miembros de San Crispín, San Pascual y San Antón, además de autoridades eclesiásticas como el párroco de San Agatángelo, Francisco Luis Soler. Entre la comitiva se encontraba también el jefe de la Policía Local, César Zaragoza, así como el nuevo comisario de la Policía Nacional, Pedro Montore, que acudía por primera vez en el cargo a una procesión en la ciudad. Había también una pequeña representación de todos los partidos que componen la corporación, aunque ninguno de Compromís, y también se notó la ausencia del alcalde, Carlos González. Entre la comitiva tampoco se encontraba el pregonero de San Agatángelo, el ex regidor ilicitano Manuel Rodríguez.

A la llegada del patrón a Santa María repicaron con fuerza las campanas, se lanzaron fuertes tracas y se entonó el himno de la ciudad para poner el broche a estas celebraciones.