Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Glorieta, reclamo del Domund

El mercadillo solidario espera recaudar este año más fondos para las misiones gracias a su nueva ubicación en la céntrica plaza

La Glorieta, reclamo del Domund

Abrió sus puertas el pasado sábado, 5 de octubre, y prácticamente no las cerrará hasta el próximo 7 de diciembre, ya que el mercadillo del Domund casi no cierra de lunes a domingo, apenas la tarde del domingo. Cumpliendo con la tradición, ya que este solidario punto de venta que impulsa la Iglesia hace más de cuatro décadas que no falla con su compromiso, este año sus organizadores están de enhorabuena, puesto que les han cedido un local en plena Glorieta. Pese a que la situación comercial del centro de Elche no atraviesa por su mejor momento, las responsables de esta iniciativa creen que el nuevo emplazamiento permitirá aumentar las ventas de calzado y, por ende, recaudar más dinero para destinarlo a las solidarias misiones que se realizan en los lugares más necesitados de todo el planeta.

La madre Belén está al frente del mercadillo, en el que cuenta con la colaboración altruista de cuatro amas de casa ilicitanas. Gracias a su desinteresado esfuerzo, las puertas del mercadillo permanecen abiertas de lunes a domingo entre las 10.30 y las 13.30 horas y entre las 17 y las 20 horas. Los últimos años habían contado con un local en la Diagonal del Palau y el pasado 2018 se tuvieron que mudar a otro establecimiento en el número 13 de la plaza de la Constitución, una tienda que había acogido durante 38 años un negocio de moda de hombre. En esta ocasión han tenido más suerte, ya que tras el cierre de Fran Rivera, tienda de alta costura de vestidos de novia y fiesta, el propietario les ha cedido un local muy bien situado, que hace esquina entre la Corredora y Obispo Tormo.

Precios asequibles

El mercadillo ha arrancado con fuerza durante sus primeros días de actividad, con un paso constante de clientes, que acuden atraídos por los buenos precios en el calzado, ya que pueden encontrar zapatillas desde 6 euros, siendo las botas de caballero las que cuentan con un precio más elevado, que alcanza los 35 euros. Todo el género a la venta ha sido cedido por las fábricas del tejido industrial ilicitano. «Son muchas las empresas que nos apoyan y no quiero citar a ninguna para no dejarme a nadie fuera», explica una de las voluntarias, María Ángeles Soto. Ella, junto a sus compañeras, algunas con más de 20 años de colaboración a sus espaldas, son las verdaderas artífices de que este proyecto pueda salir adelante.

Los que acudan al mercadillo del Domund hasta el próximo 7 de diciembre también podrán encontrar en él otros productos más allá del calzado, como bolsos, chaquetas o pantalones, cedidos por particulares. «Todo lo que vendemos aquí está sin estrenar», recalca Soto antes de añadir: «Para nosotras es un placer colaborar con este proyecto, es nuestra forma de ayudar a la sociedad». Este año esperan que la ubicación en la Glorieta les permita recaudar más fondos para unas misiones humanitarias que pretenden cambiar el mundo y hacerlo más justo.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats