El Parque Industrial de Torrellano se ha quedado pequeño y de eso los empresarios son conscientes mientras ven cómo se están tramitando 600.000 metros cuadrados de superficie, pero que a día de hoy no pueden estar disponibles. Se encuentran con que la empresa municipal, encargada de comercializar los terrenos en el enclave económico, Pimesa, ha agotado prácticamente todas sus parcelas. Solo le quedan tres, después de la reactivación económica de estos dos últimos años haya supuesto vender quince solares.
Con inquietud y preocupación. Así ven desde el Círculo Empresarial de Elche y Comarca (Cedelco) la lentitud con la que avanza la ampliación de un parque industrial, que es referente en el país, ante la complejidad burocrática que ha eternizado su resolución desde que hace tres años comenzara a orquestarse. De hecho, hablan del temor a que cuando se desarrollen las obras en la zona comprendida entre la Vía Parque y la A-7 ya no se llegue a tiempo por la fuga de capital a otras zonas que ya tengan suelo disponible.
El caso de Tempe -la sociedad que comercializa y distribuye desde Elche el calzado y los complementos que el grupo Inditex destina a marcas como Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka o Stradivarius- y su reciente compra de suelo en Parc Sagunt, ha empezado a poner algo nerviosos a los empresarios. Mientras, el Ayuntamiento ha llamado esta semana a la calma y se muestra convencidos de que el gigante de Inditex sigue teniendo interés en la ciudad y más aún cuando están levantando otra nave en estos momentos en el parque.
Sea como sea, el sector empresarial no puede evitar estar a la expectativa de lo que pueda pasar cuando por fin haya suelo al alcance y más aún cuando ni el alcalde, Carlos González, se atreve a dar plazos del inicio de las obras de ampliación. Lo que sí que está claro es que las gestiones para ganar suelo han entrado en la recta final y solo faltan dos documentos por aprobar para que pueda gestarse, a partir de ahí, la redacción del proyecto de urbanización. De los veinte informes sectoriales necesarios, se han realizado hasta el 90% quedando pendientes dos ante el Ministerio de Fomento y la Conselleria de Medio Ambiente.
Para finalizar este largo camino, también será necesario celebrar una subasta pública para que las empresas puedan adquirir los terrenos si se ajustan a sus proyectos.
El despegue
El creciente interés de las empresas por asentarse en uno de los espacios industriales de referencia en el país hace que, a día de hoy, haya más demanda de suelo de la que pueda atender el Parque Empresarial. De hecho, Pimesa advierte que si se pudieran materializar ya todos los contactos que han llegado hasta las oficinas de la empresa municipal, la zona de la ampliación ya estaría agotada.
No muy lejos queda el ejemplo de lo que ocurrió en 2011, con la anterior reparcelación recién acabada, cuando la crisis económica estranguló la venta de parcelas e hizo que hasta hace dos años Pimesa apenas pudiera cerrar operaciones de venta de suelo.
De ahí que en la empresa municipal ya vean necesario empezar a pensar en el suelo del futuro, en el que necesitará el Parque Empresarial una vez haga realidad la tan esperada ampliación, para no verse en las mismas circunstancias que ahora, con apenas tres parcelas municipales disponibles y con una ampliación que se está alargando más de lo deseado, pese a que el Consell declaró el procedimiento de urgencia para acelerar los trámites.
En estos dos últimos años, la venta de suelo ha sido imparable en el Parque Empresarial. En total, Pimesa ha logrado colocar 15 terrenos, lo que ha supuesto una inyección económica de capital privado para el enclave de Torrellano de 97 millones de euros, lo que ha permitido 500 puestos de trabajo previstos de manera directa e indirecta. Las últimas operaciones se han cerrado con firmas de fabricación en serie de calzado, una lavandería industrial, una empresa de comercialización y transformación de productos alimentarios, de fabricación de plantillas anatómicas, de envasado y diversificación de fertilizantes líquidos o de alquiler de vehículos industriales. En las dos últimas semanas se han dado licencias para levantar dos naves.
