La Conselleria de Medio Ambiente reconoce que no dispone de medios para frenar la caza en el Parque Natural de El Hondo, una zona que cuenta con fincas perimetrales donde sí se puede llevar a cabo esta actividad, pero que se da en los límites de un enclave que acaba de cumplir 30 años desde que fuera declarado espacio protegido y donde se dan cita aves acuáticas en peligro de extinción como, por ejemplo, la cerceta pardilla y la malvasía cabeciblanca.
A raíz de una pregunta parlamentaria, la consellera Elena Cebrián indica que los recursos humanos y materiales «resultan escasos e insuficientes, en la mayoría de los casos» y que sobre el terreno son los agentes medioambientales y otros cuerpos autorizados los encargados de vigilar la actividad de dar cumplimiento a lo establecido en el plan rector de uso y gestión del parque y en el correspondiente plan de ordenación cinegética.
«Las necesidades de control y vigilancia que competen a los agentes medioambientales se concentran especialmente en los fines de semana», añaden desde la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.
Hasta las Cortes Valencianas
La difusión a finales del pasado mes de abril de una impactante imagen con decenas de aves cazadas generó, primero, la denuncia pública de Amigos de Humedales del Sur de Alicante (AHSA) y, posteriormente, una serie de preguntas en las Cortes Valencianas por parte del grupo parlamentario Podemos-Podem, en concreto, a cargo de la diputada Beatriz Gascó.
«Nuestro grupo parlamentario ha sido conocedor de una fotografía, tomada por AHSA, que constata la matanza de 250 patos pertenecientes a las especies de pato cuchara (Anas clypeata) y porrón común (Aythya ferina) a cargo, según parece, de seis cazadores en el coto de la Raja, en el Parque Natural de El Fondo, en febrero de 2018, durante la última temporada de caza. Las aves abatidas pertenecen a especies catalogadas como cinegéticas por la actual Ley de Caza y la actividad en El Fondo está regulada por dicha norma, así como por las órdenes de veda», señalaba la diputada en el arranque de su pregunta.
Ante la «desproporcionada» cantidad de patos abatidos «en una sola cacería», Podemos entiende que existen serias dudas de que las autoridades estén realizando un control efectivo sobre el número de aves autorizadas para ser abatidas y las que, finalmente, resultan muertas, de ahí que formulara una serie de preguntas a la consellera en este sentido y que ha respondido recientemente.
La foto difundida a finales del pasado mes de abril llevó a AHSA a indicar que la persona que facilitó la fotografía afirmó que se había realizado en febrero en un coto de El Hondo. Al parecer, el entorno de la fotografía concordaba con la casa de uno de los cotos de caza de mayor superficie de este parque natural, según indicaban los ecologistas en un comunicado de prensa.
Ante las dudas surgidas por el contenido de la mencionada fotografía, en cuanto al debido control que la Conselleria de Medio Ambiente debe de ejercer sobre la actividad cinegética en este espacio natural, el grupo ecologista se dirigió en su día a la Dirección Territorial en Alicante de esta Administración autonómica para, a través de un escrito, en el que se adjuntaba una reproducción de la fotografía, solicitar una copia del informe por el que se habría autorizado el número y especies de aves acuáticas a ser abatidas en los cotos de caza del Parque Natural de El Hondo, durante la temporada 2017-18, así como los censos en los que se han basado para su elaboración.
Síndic de Greuges
Sergio Arroyo, presidente de AHSA, lamenta que la Administración autonómica no haya contestado en tiempo y forma, sino que hayan tenido que recurrir en varias ocasiones al Síndic de Greuges para reclamar al Consell esa información, algo que se ha conseguido parcialmente, ya que de los cinco cotos de caza autorizados, solo han tenido acceso a los datos de uno de ellos.
«Lo que queremos es denunciar es el oscurantismo que hay en la gestión de la caza en El Hondo», agrega Arroyo, quien lamenta también la escasez de inspecciones de los agentes ambientales y que parte de este trabajo lo tenga que hacer el Seprona, cuerpo que carece también de medios humanos suficientes para ello.
El presidente de la junta rectora del Parque Natural de El Hondo, Vicent Sansano, también considera que los plantes cinegéticos se deberían revisar, sobre todo por la cuestión del cambio climático «que nos está afectando más de lo que nos imaginamos», y a su juicio, la caza, en cualquier caso, está yendo a menos, porque cada vez hay menos cazadores y por la propia crisis económica.
En cualquier caso, la conselleria que dirige Elena Cebrián avanza que en los próximos meses llevará a término una evaluación de la metodología seguida en los diferentes planes técnicos para determinar los contingentes de aves acuáticas susceptibles de ser cazadas, por lo que quedaría cualquier actuación posterior sobre este tema supeditada al resultado de esta valoración técnica.
