Al skate park de El Altet ya le han salido desperfectos a un mes de su estreno. Así lo denuncian los vecinos de la pedanía ilicitana, en concreto, desde la nueva formación política defensora de la segregación de la partida rural, Decide El Altet.
El colectivo ha señalado que las instalaciones han sido todo un éxito entre los chavales. La coincidencia con las vacaciones de verano ha hecho que sea una instalación muy utilizada.
No obstante, critican que pese al uso intensivo de la citada instalación deportiva, y a pesar de las advertencias que señalan que hicieron al respecto, las pistas presentan ya desperfectos y deficiencias en la madera por el desgaste.
La formación duda si se trata de fallos de construcción, de mantenimiento o "parches que quedan muy bonitos en las fotos, pero que luego dejan con una sensación de cabreo generalizado en la población".
El parque cuenta con una plataforma de hormigón de 500 metros cuadrados, de ellos, 300 corresponden a la pista y los otros 200 metros están completados con una zona de sombra para el descanso de los deportistas y por otra instalación dedicada a la calistenia, un tipo de actividad física al aire libre que cuenta cada vez con más seguidores en Elche. De hecho, recientemente se inauguró una zona similar en plena ladera del Vinalopó.
Los 300 metros del skate park, que cuenta con un presupuesto para su obra de 50.000 euros, están repletos de diferentes módulos con rampas de distintos desniveles que permitirán la práctica del patinaje. Una de las rampas es de tipo half pipe, las más comunes en este mundillo, de medio tubo o forma de «U». También hay dos rampas quarter pipe, un módulo fun box y dos unidades de raíles sobre las que los más valientes pueden grindar, lo que en el argot skate y entre los más atrevidos significa deslizarse sobre los bordillos.
Todo el perímetro de este nuevo parque que estrenó El Altet el pasado 19 de julio está provisto de una valla guardarraíl que sirve como elemento de protección. Por otra parte, y dada la concepción de espacio abierto con la que cuenta el skate park, se ilumina gracias a un alumbrado público. El nuevo complejo deportivo lo ha ensamblando la compañía Pearl Jumps Ramps, que es especialista en el desarrollo y montaje de este tipo de instalaciones. Todos los elementos que ofrecen han sido testados previamente por profesionales que se dedican a los deportes de estilo libre.
La creación de este skate park responde a una demanda vecinal, según anunciaron desde el Ayuntamiento ilicitano y se ubicará junto al pabellón polideportivo de la pedanía, el Francisco Javier Ródenas. «Estamos dando respuesta a las reivindicaciones de los más jóvenes, que ahora tendrán una instalación lúdica y deportiva de referencia», manifestó el alcade, Carlos González. Para diseñar esta obra se ha contado con las opiniones de primera mano de los usuarios, a lo que se añade la experiencia de la empresa especializada que se está encargando de su ejecución.
Todos los elementos que conforman el skate park son metálicos y con rampas de madera especial, con las que conseguir minimizar el impacto de las caídas de estos valientes deportistas. «El resultado de todo esto es que no se podrá encontrar en toda la provincia de Alicante un parque con unas condiciones así», añadió entonces el concejal Héctor Díez, que también quiso reivindicar la importancia de las pedanías.
