Para muchos, un ahorro en la factura de consumo energético puede ser el principal motivo para para limitar los excesos de luz en las calles, pero no es el único. Así, desde hace años, antes incluso de que la crisis obligase a recortar gastos, hay muchos colectivos que tratan de concienciar de los efectos negativos de la contaminación lumínica o los excesos en el alumbrado público en el medio ambiente.

En este sentido, el presidente de AstroGeda, la Agrupación Astronómica de Elche, Victoriano Canales, apuntó que en general «hay farolas que desperdician luz, o focos en monumentos que están mal orientados». En este sentido, el responsable destaca la iluminación en el puente del Bimil·lenari, «con focos que alumbran cada uno a un punto distinto, con lo que la luz se desperdicia». Y algo parecido sucede en el céntrico palacio de Altamira y su entorno.

Canales destaca el ahorro que se puede producir con las luminarias adecuadas, «aquellas que orientadas hacia abajo con "capota", emiten la luz hacia la acera» frente a otras tipo globo, que son totalmente esféricas, con lo que la luz se escapa hacia arriba y puede incluso llegar a molestar a los residentes de los primeros pisos o entresuelos.

Además de para ver las estrellas y por el ahorro, otra de las razonas por las que es conveniente racionalizar el consumo de luz es el cuidado del medio ambiente.

«El impacto es brutal», apuntó desde la Asociación de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA), Sergio Arroyo. «Se abusa mucho de la iluminación incluso en zonas cercanas a parajes protegidos, como en el Clot -en su línea con Gran Alacant- o en las rotondas. Y es que «ahora parece que hasta el campo tiene que estar bien iluminado», expresó. Además, el responsable, destacó también el impacto paisajístico que ello provoca.

Por su parte, el concejal de Vía Pública, Héctor Díez, explicó que Elche está reduciendo poco a poco el consumo energético y ya se están tomando medidas que, además de por el ahorro, van encaminadas a reducir la contaminación lumínica. De hecho, en zonas con farolas superiores e inferior, estas últimas no se están encendiendo, como sucede en algunos tramos de la Avenida de la Libertad. Por otro lado, en breve se dotará a las luminarias de reductores de flujo lumínico, lo que permitirá reducir la luz en horario de madrugada, aunque siempre manteniendo las condiciones idóneas para la seguridad de peatones y vehículos.

En un aspecto más general, en cuanto a los efectos, desde SEO Birdlife, Toni Zaragozí, recuerda que en el mejor de los casos, los pájaros huyen de la luz, pero hay otras ocasiones en las que las especies modifican su comportamiento, volando más alto para escapar de las luces o aún peor, ejemplares que, totalmente desorientados, acaban estrellándose contra cristaleras, como ocurre en las zonas de costa.