Dos años y dos meses después de que Rafael Ramos Fernández, director del Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE), dejara su trayectoria profesional aparcada en el tiempo con su jubilación, el Ayuntamiento sigue sin nombrar responsable alguno al frente de la instalación museística, tal y como exige La Ley del Patrimonio Cultural Valenciano (de 11 de junio de 1998), que incluye entre los requisitos indispensables para los museos la designación de un técnico superior al frente de la instalación. En la actualidad, según la web del Ayuntamiento de Elche, el MAHE cuenta sólo con técnicos de nivel medio, al frente de las áreas de restauración y documentación, junto a personal de servicios múltiples, administración y un ordenanza. Además, y con anterioridad a marzo de 2012, el entonces responsable del MAHE lo era también del resto de museos municipales de la ciudad. En este sentido, según ha podido conocer INFORMACIÓN, tanto la alcaldesa, Mercedes Alonso, como el coordinador de Cultura, Pablo Ruz, trabajaron en los meses siguientes a la jubilación de Ramos Fernández para intentar buscar un profesional idóneo para cubrir la plaza, pero las limitaciones económicas paralizaron en el tiempo la solución. En este sentido, la Ley del Patrimonio Cultural Valenciano también habla, junto a la necesidad de tener un técnico superior al frente del museo (a cargo del propio Ayuntamiento), de otros requisitos, la mayoría cumplidos de sobra en la instalación ilicitana, en especial la ampliación del horario de visitas que, desde finales de 2012, se ha convertido, sólo en el MAHE, en jornada continua (de lunes a sábado, 10.00 a 18.00 horas; y domingos y festivos, de 10.00 a 15.00 horas), como una teórica apuesta por reforzar la presencia de turistas. Aún así, desde el Ayuntamiento ilicitano se ha venido hablando, en los últimos años, de la pretensión de convertir el MAHE en un «buque insignia» de la cultura y el turismo en Elche, y de acercarse lo máximo posible al modelo museístico del MARQ de Alicante, algo que está lejos de la realidad a tenor de la diferencia de personal especializado en historia y arqueología de ambas instituciones.
Sin embargo, el incumplimiento de la Ley de Patrimonio va, incluso, más allá si se habla de las funciones de los museos (el MAHE consiguió esa calificación hace 20 años), ya que las circunstancias actuales hace que sea imposible «catalogar y exhibir de forma ordenada sus colecciones, con arreglo a criterios científicos, estéticos y didácticos», según refleja la modificación de la ley realizada en 2007, y en cuyo artículo 68 también se menciona como función -en Elche sin poder realizar- la de «investigar y promover la investigación respecto de sus colecciones o de la especialidad del museo; organizar periódicamente exposiciones científicas y divulgativas acordes a su objeto -historia y arqueología- y elaborar y publicar catálogos y monografías de sus fondos». No obstante, y para cubrir algunos aspectos y actividades que no se pueden asumir desde el propio MAHE, el Ayuntamiento de Elche sí que ha contratado, con carácter anual, una empresa externa que se encarga de los talleres didácticos y de organizar el plan (muy libre) de exposiciones para la temporada cultural.
