Sergio Pelegrín, técnico del Ilicitano, compareció este viernes en la rueda de prensa previa al inicio de Liga de su equipo, que debutará el domingo por la mañana (11.00 horas) en el Díez Iborra contra el Atzeneta, uno de los clubes llamados a estar arriba en la clasificación.
El técnico espera una campaña en la que se puedan cumplir todos los objetivos marcados. «El objetivo principal de un filial es nutrir a jugadores al primer equipo. Cada vez que Pacheta convoca a un jugador es una alegría, ojalá ocurra todas las semanas», explicó. «Además, queremos ser los más competitivos posible en liga», agregó.
Pelegrín tendrá seis bajas para el estreno liguero. Óscar Gil viaja con el primer equipo a Alcorcón, Kiko, Salinas y Diego están lesionados, mientras que Cassano y Rubén tendrán que cumplir un partido de sanción por ciclo de amonestaciones a la conclusión de la temporada anterior. Pese a las bajas y a una pretemporada «accidentada», el técnico espera acumular «buenas sensaciones» desde el primer momento, por encima incluso de los resultados.
«La situación es buena. Estamos en perfectas condiciones anímicas, con muchas ganas de que empiece lo bueno y que el trabajo de pretemporada dé sus frutos», apuntó un Pelegrín que podrá contar con Luis Castillo, Alberto Rubio, César Moreno y Nacho Ramón, que vienen entrenando durante toda la pretemporada con el primer equipo y esta vez no han sido citados por Pacheta.
Sobre el rival, Pelegrín vaticinó que será uno de los gallitos de la categoría: «El Atzeneta es un buen equipo. Hay tres candidatos a estar en lo más alto y es uno de ellos. Es un equipo nuevo, pero han hecho una apuesta económica importante, con jugadores que incluso tienen experiencia en categorías superiores». Para finalizar, el técnico del Ilicitano solicitó el apoyo de la afición en el Díez Iborra: «Es un buen horario para que la gente se acerque al campo y vea lo ilusionados que estamos todos porque el primer equipo juega el sábado. Con ese apoyo estoy convencido de que vamos a hacer un buen papel».
