La Sareb, la sociedad que se creó para asumir los activos inmobiliarios de las cajas nacionalizadas, sigue soltando lastre en la provincia, donde todavía acumula una cantidad ingente de ladrillo debido a las inversiones que en su día realizaron entidades como Bancaja, Caja Murcia o Caja Madrid al calor de los altos precios que se pagaban durante los años de la burbuja. Según los datos facilitados por la propia compañía, el también conocido como «banco malo» logró desprenderse el año pasado de 687 inmuebles de todo tipo en la zona, lo que supuso un 22% más que en el ejercicio precedente, aunque la mala noticia es que el valor de estas transacciones, de 55,5 millones de euros, fue un 2,2% inferior.
Un resultado agridulce que se justifica por el menor importe que la sociedad presidida por Jaime Echegoyen consiguió con las transacciones de suelo y que, según la propia compañía, se debió, en parte, a la decisión de reservar algunos de sus mejores solares para el Fondo de Activos Bancarios que ha constituido con el fondo Värde Partners y Aelca con el objetivo de potenciar sus promociones propias. Una iniciativa con la que pretende mejorar el rendimiento que saca a su cartera, gracias a los mayores márgenes de beneficios que se obtienen con las viviendas terminadas, en comparación con los solares.
De esta forma, frente a los 18,5 millones que la Sareb ingresó en Alicante por la venta de terrenos en 2017, el año pasado se tuvo que conformar con 11 millones de euros, de acuerdo con el balance facilitado por la firma, que destaca que el mayor número de operaciones en este segmento se concentró en la Vila Joiosa, Xàbia, Finestrat y Polop.
Por el contrario, el «banco malo» supo aprovechar la mejora del mercado inmobiliario local para vender más activos residenciales, una categoría en la que incluye las viviendas y sus anejos. En concreto, se desprendió de 351 casas y 213 garajes y trasteros, con los que consiguió 40,3 millones de euros, 5,1 millones más que en el ejercicio anterior. En este caso, los municipios en los que Sareb consiguió el mayor número de transacciones fueron Alicante, Dénia, La Vila y Torrevieja. A esto hay que añadir las ventas de locales comerciales y naves industriales, que sumaron alrededor de cuatro millones de euros más.
De créditos a ladrillo
A pesar de este importante ritmo de ventas, la cartera de inmuebles a cierre de año apenas varió en relación a 2017 y el «banco malo» acumulaba el pasado diciembre unas 5.700 propiedades en la provincia. En este sentido, hay que recordar que la principal tarea de Sareb consiste, precisamente, en transformar los créditos de promotor que recibió y que supusieron el 70% de su cartera inicial o bien en efectivo -si es que logra cobrarlos- o bien en inmuebles, que son más fáciles de vender posteriormente. Esto hace que, aunque consiga desprenderse de un volumen de casas significativo cada año, por otro lado, siga recibiendo nuevas viviendas o solares que le van traspasando los promotores como dación en pago o vía embargo.
De hecho, uno de los objetivos de Sareb es acelerar este proceso ya que las ventas de carteras de créditos suelen ser más costosas y, sobre todo, exigen de mayores descuentos que la comercialización de inmuebles, lo que contribuye a elevar las pérdidas que arrastra la sociedad, que solo el año pasado anotó unos números rojos de 878 millones de euros. Unas pérdidas que será muy difícil que desaparezcan, dado el precio que se fijó para el traspaso de activos desde las cajas nacionalizadas -al fin y al cabo, la creación de la Sareb fue una forma de contribuir a su rescate- pero que el «banco malo» quiere, al menos, minimizar en lo posible.
Dentro de esta estrategia para mejorar sus cuentas, la sociedad quiere renegociar los contratos que mantiene con Haya Real Estate, Solvia, Altamira Asset Management y Servihabitat para la comercialización de sus inmuebles; conseguir gestores más especializados por segmentos; y potenciar la línea de promociones propias, mediante el citado acuerdo con Värde Partners y Aelca, al que traspasará una cartera de obras en curso y terrenos valorada en 800 millones de euros.
Promociones en curso
Con anterioridad a esta iniciativa, la Sareb ya ha finalizado en la provincia 229 viviendas que recibió a medio construir en La Vila, Torrevieja, Alicante, Xàbia y Dénia, de las que ya ha vendido más de la mitad. Además, la compañía también construyó desde cero una nueva promoción de 35 viviendas en la playa de San Juan, y tiene otra a punto de escriturar -el residencial Camenas- en la playa de Muchavista en El Campello con 90 unidades. Igualmente, tiene previsto iniciar otro complejo de 25 viviendas de 2 y 3 dormitorios y con piscina comunitaria en Benidorm, del que aún no ha empezado su comercialización.
