No es fácil llevar el timón de una empresa, pero más complicado aún es conseguir que esa compañía se convierta en centenaria. Por eso mismo, la Cámara de Comercio de Alicante y la Asociación de la Empresa Familiar (Aefa), con el patrocinio de la Diputación de Alicante y de Cajamar, y con la colaboración de INFORMACIÓN, entre otras entidades, celebraron ayer en el Teatro Principal de Alicante la primera gala para reconocer la labor de las firmas centenarias de la provincia.
De hecho, los organizadores estiman que en estos momentos puede haber en Alicante un centenar de empresas que supera el siglo de vida, y la idea es ir distinguiendo su trayectoria en un acto que tendrá continuidad en sucesivas ediciones. De momento, en la jornada de ayer fueron nueve las empresas premiadas con el «Faro» con el que se trata de poner en valor el papel que han jugado en esta provincia. La elección, en este sentido, no ha sido casual. Al fin y al cabo, se considera que estas firmas han sido un faro en la sociedad alicantina, e incluso son una referencia para los futuros emprendedores, tal y como se resaltó a lo largo de la gala. En paralelo, se creará el Club de Empresas Centenarias, que tendrá su sede en la Cámara de Comercio de Alicante, según anunció su presidente, Juan Riera. «Con este proyecto queremos dar a conocer una parte importantísima de la historia empresarial de la provincia, ponerla al servicio de la sociedad y de los investigadores, y crear vocaciones entre nuestros jóvenes», dijo Riera. El Club de Empresas Centenarias que se va a crear contará con el asesoramiento técnico del Museo Comercial de Alicante y provincia.
Para comenzar con la primera tanda de reconocimientos, en el acto de ayer se optó por nueve empresas de diferentes sectores y de distintas comarcas. Así, se homenajeó a Verdú Cantó Saffron Spain, de Novelda; a La Alcoyana, de Alcoy; a Bras del Port, de Santa Pola; a Chocolates Valor, de La Vila; a Fernando Flores, de Alicante; a Unión Alcoyana Seguros, de Alcoy; a Aguas de Alicante; a Harinas Andrés Serrano, Elche-Orihuela; y a Almendra y Miel, propietaria de las marcas de turrón 1880 y El Lobo, de Jijona.
Durante su intervención, el presidente de Aefa, Francisco Gómez, puso el acento en que el germen de estas compañías centenarias son en la mayoría de los casos empresas familiares, e hizo hincapié en que esto solo es el principio. Habrá más galas para reconocer a las compañías que tienen localizadas hasta ahora, unas 90 según sus cálculos. Sin embargo, no se quedó ahí, y tiró del tono más reivindicativo que suele caracterizar sus intervenciones. Algo lógico, por otra parte, teniendo en cuenta la cercanía de la cita con las urnas. Es más, el anuncio del jefe del Consell y candidato a la reelección por el PSPV, Ximo Puig, de que si gana su partido aplicará exenciones del 99% al impuesto de sucesiones y donaciones no fue obstáculo para que Francisco Gómez reivindicara una rebaja de la presión fiscal, especialmente por lo que respecta a este tributo, para que más compañías puedan invertir en este territorio. «Los empresarios estamos cansados de promesas que no se cumplen», sentenció, con un tono muy crítico.
También las demandas para la provincia centraron las intervenciones de los representantes políticos. Sin ir más lejos, el presidente de la Diputación y cabeza de lista del PP al Congreso de los Diputados por Alicante, César Sánchez, subrayó la importancia de las infraestructuras para el crecimiento y, en particular, se refirió a una mejor conexión entre Elche y Alicante y al enlace ferroviario de ambos municipios con el aeropuerto. Finalmente, el alcalde de Alicante y candidato por el PP en las municipales, Luis Barcala, incidió en que «estas empresas han sabido renovarse y adaptarse a la demanda en cada momento, y recientemente en la crisis». Por su parte, Manuel Nieto, director territorial de Cajamar en Alicante, destacó durante su alocución que, «con estos reconocimientos, se pone de manifiesto que las empresas que perduran en el tiempo se caracterizan por las buenas prácticas y la gestión responsable y por su capacidad de adaptación y su constante innovación».
