El desempleo bajó en julio en Alicante. Más de 1.220 personas lograron salir de las listas del paro, y la contratación y la afiliación a la Seguridad Social crecieron en la provincia. Buenos datos para un mercado laboral que hace apenas unos años se encontraba sumido en cifras negativas como consecuencia de una intensa crisis.

Pero la comparativa con ejercicios anteriores, justo cuando la economía alicantina comenzaba a superar la recesión y a engancharse a la senda de la recuperación, revela que la creación de empleo y la bajada del paro se ralentizan. Este descenso del desempleo es el más bajo en un mes de julio en los últimos cuatro años. El peor dato desde 2014, cuando el paro se redujo en 885 personas. Además, es el segundo peor registro mensual consecutivo este año. En junio, los más de 3.880 alicantinos que lograron salir de la situación de desempleo ya representó la cifra más baja de los últimos siete años.

A pesar de que la actividad de servicios es la que más redujo su bolsa de paro en julio, registrando 1.392 desocupados menos, desde el sector hotelero de Benidorm -capital turística de la Costa Blanca-, ya alertan de que la ocupación en los establecimientos cayó dos puntos el pasado mes y de que se «preparan para un nuevo bache en agosto», en plena campaña estival. Además, los recientes datos del comercio exterior -correspondientes al mes de mayo, último dato publicado- reflejan que las exportaciones provinciales no sólo bajaron un 3,7% en el quinto mes del año en relación al mismo periodo de 2017, sino que en el acumulado anual, la facturación internacional de Alicante apenas superó el 0,26%.

Menor crecimiento del PIB

Datos provinciales que se enmarcan dentro de un escenario estatal que indicaría que la economía española estaría entrando en un periodo de desaceleración, ya que el Producto Interior Bruto (PIB) solo creció un 0,6% en el segundo trimestre, una décima menos que en el periodo anterior. En este contexto, los sindicatos mayoritarios en la provincia (CC OO y UGT) advierten del empleo «precario y temporal» que se está creando y la patronal autonómica CEV hace una «valoración moderadamente positiva» de la evolución del paro en julio. ¿Por qué? Porque «las trayectorias de la bajada del desempleo y las de los aumentos en la contratación y la afiliación a la Seguridad Social consolidan una tendencia a la ralentización. Un mes más, el descenso del paro es menos intenso que en 2017 y la contratación y el número de cotizantes también pierden dinamismo», señala en un comunicado la patronal, que preside Salvador Navarro.

Este diagnóstico que realizan los empresarios a nivel autonómico, también tiene su traducción en la provincia. Alicante cerró julio con un total de 143.509 parados. Son 1.226 menos que en junio y 7.231 menos que un año antes, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Trabajo. Por su parte, la contratación alcanzó la cifra de 70.730 nuevos empleos, que representan 4.891 más que un mes antes. No obstante, el 91,4% (64.690) tuvo un carácter temporal. Y sólo el 8,5% (6.040) fueron contratos indefinidos. Según denuncian UGT y CC OO, estos datos «evidencian el subempleo que se está creando», señala Yolanda Díaz, responsable de Empleo de UGT en l'Alacantí-La Marina.

Por su parte, la afiliación a la Seguridad Social, aunque registra un total de 664.988 cotizantes al sistema en julio, cifra superior a los 657.562 del mismo mes de hace una década -al inicio de la crisis-, representa un crecimiento mensual inferior al del pasado año. En julio de 2017, se produjeron 8.951 nuevas altas laborales, mientras que este año el aumento ha sido de 6.960, casi dos mil menos.

En el inicio de la temporada estival, el mejor comportamiento, como es habitual, lo ha tenido el sector de servicios, en el que se encuadran los negocios dedicados al turismo, seguido del grupo que conforman los demandantes de su primer empleo, que reduce el paro en 105 personas. Un colectivo, además, que suele encontrar más fácil acceso a su primer puesto de trabajo en los servicios de cara a las campañas turísticas o vacacionales: en Navidad, Semana Santa o verano.

Aumenta el paro en construcción

También la industria refleja un ligero descenso de su bolsa de parados, con 63 menos. Sin embargo, la agricultura suma 73 y, especialmente, la construcción aumenta el número de desocupados en 258 personas, pese al repunte de la actividad experimentado en los últimos años, tras el largo periodo de crisis sufrido. CC OO atribuye esta evolución al empleo de la construcción ligado a los servicios e industria que se genera con carácter previo a la temporada turística; «para la actualización o modernización de los establecimientos (restaurantes, bares, hoteles...)», explica José María Ruiz Olmos, responsable de comunicación del sindicato en l'Alacntí-Les Marines.

Desde UGT y CC OO insisten en que «el descenso del paro se está ralentizando» y en que el mercado laboral provincial «sigue estando marcado por una «estacionalidad crónica y un abuso de la contratación temporal y parcial».