El enfrentamiento que mantienen las patronales de Valencia y Alicante alcanza hoy un nuevo punto de inflexión. Los caprichos de la agenda han querido que la asamblea general convocada por la CEV para autoproclamarse como la nueva patronal autonómica de la Comunidad coincida con el primero de los desayunos de actualidad que ha puesto en marcha Coepa para recuperar su imagen y que contará como invitado con el exministro José Manuel García Margallo. La coincidencia no habría tenido mayor importancia en otras circunstancias pero, en estos momentos, ambas organizaciones la han convertido en un pulso para ver con qué apoyos cuenta cada una de ellas.
No es una cuestión menor ya que, precisamente, lo que se cuestionan mútuamente es la representatividad de cada una de ellas. La CEV aspira a hablar por boca de todos los empresarios de la autonomía -para ello prevé integrar en su seno a cuantas más organizaciones sectoriales y empresas particulares pueda- pero sin tener en cuenta la actual estructura de patronales provinciales, que considera superada y que sustituye por unos nuevos consejos empresariales de nuevo cuño, sin capacidad económica alguna y con un papel limitado.
Por su parte, Coepa reivindica la vigencia y la necesidad de mantener la representación provincial, ante el convencimiento de que las cosas en el «cap i casal» no siempre se ven de la misma forma que en la «terreta» y que los intereses no siempre son coincidentes. Por eso, ante el «ninguneo» al que aseguran que les ha sometidfo el presidente de la CEV, Salvador Navarro, con su propuesta de nueva patronal autonómica, el máximo responsable de la confederación alicantina, Francisco Gómez, ha querido movilizar al mayor número de empresarios en el acto de hoy, como demostración de fuerza.
Si no le falla nadie, serán más de 200 asistentes, entre los que habrá representantes de las principales instituciones alicantinas, como la Diputación, y también de las patronales sectoriales a las que quiere cortejar Navarro, como Provia, Jovempa, Avecal e, incluso, Hosbec, que nunca ha ocultado su interés por incorporarse a la nueva autonómica pero tampoco quiere ser señalada por abandonar Coepa .
El disputado apoyo de CEOE
Por su parte, la CEV tampoco se ha quedado quieta. Tras acudir el pasado miércoles a Madrid para entrevistarse con el presidente de la CEOE, Juan Rosell, y atribuirse su apoyo en el conflicto -un respaldo que desde la patronal española aseguran que no han dado ni pueden dar porque se trata de una disputa interna entre dos de sus socios-, la convocatoria lanzada a los medios de comunicación para hoy vuelve a alardear de la presencia prevista de hasta cuatro vicepresidentes de CEOE en la asamblea, uno de ellos, el valenciano José Vicente González, presidente de Cierval, cuya liquidación es lo que ha desatado el conflicto. También de «una nutrida representación institucional en la que figuran los presidentes de la Cámara de Comercio (de Valencia) y de AVE (la poderosa Asociación Valenciana de Empresarios), José Vicente Morata y Vicente Boluda, respectivamente».
Como ocurre en las noches electorales, seguramente mañana, tanto la CEV, como Coepa van a destacar sus respectivos éxitos de convocatoria para reivindicarse ante las próximas negociaciones. Al menos, eso es lo que esperan la mayoría de los empresarios, que confían en que finalmente Navarro y Gómez sean capaces de llegar a un acuerdo.
