Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Sólo las elecciones municipales y los trabajos de mantenimiento dan oxígeno a la obra pública

Las licitaciones alcanzaron en la provincia los 191 millones durante los nueve primeros meses de 2014

Sólo las elecciones municipales y los trabajos de mantenimiento dan oxígeno a la obra pública

Sólo las prisas de los ayuntamientos por tener algo que inaugurar antes de las próximas elecciones municipales y la aprobación de algunos encargos de mantenimiento de carreteras por parte de la Generalitat están logrando que el sector de la obra pública empiece a recuperar algo de fuelle en la provincia, tras haber tocado fondo durante el año 2013. Así, de acuerdo con los últimos datos en poder de Seopan, la patronal nacional del ramo, el volumen de nuevas licitaciones en Alicante alcanzó los 191,5 millones de euros entre los meses de enero y septiembre del año pasado. Una cifra que supone duplicar los números del ejercicio anterior pero que, como recuerdan los empresarios, sigue siendo más de un 80% inferior a lo que era habitual antes del estallido de la crisis económica.

«Es cierto que se nota un repunte pero son cifras todavía de mínimos. Apenas hay proyectos realmente nuevos y lo que observamos en los presupuestos del Gobierno y del Consell es que este 2015 va a seguir igual. Queda mucho para que podamos hablar de recuperación del negocio», asegura el presidente de la Federación de Obras Públicas de Alicante (FOPA), Javier Verdú, que agrupa a las principales constructoras especializadas en este segmento.

En el desglose por administraciones, el Gobierno central es el único que continúa recortando sus inversiones en la provincia. Hasta septiembre había destinado a nuevas licitaciones 52,6 millones de euros, según Seopan, un 6,1% menos que en el mismo periodo de 2013 y todo apunta a que nada va a cambiar esa tendencia. Verdú asegura que Alicante ha resultado especialmente «maltratada» en las cuentas públicas para este año, en las que se ha priorizado el Corredor Mediterráneo en Castellón.

Aquí, por el contrario «ni siquiera aparecen consignaciones para la variante de la N332 en Benissa -lo que indica que no se retomarán las obras- o para el desdoblamiento de la calzada en los accesos al aeropuerto», dos de la obras que el presidente de FOPA considera prioritarios y en los que confiaba el sector.

Carreteras

Por su parte, la Generalitat era la administración que más dinero había destinado a licitaciones en la provincia en los nueve primeros meses de 2014, con un total de 79,83 millones, el triple que en el mismo periodo del ejercicio precedente. Sin embargo, Verdú aclara que no se trata de nuevas obras, sino que la mayoría corresponde a contratos de mantenimiento de carreteras que se han desglosado en varios años. Además, en la última reunión que la consellera Isabel Bonig mantuvo con los empresarios alicantinos ya les dejó claro que no hay dinero para iniciar nuevas infraestructuras y que ahora la apuesta del Gobierno autonómico pasa por la rehabilitación.

De esta forma, el único estamento en el que realmente se están notando un incremento en las partidas destinadas a obra pública es en el municipal, tanto por parte de la Diputación, como por parte de los ayuntamientos, según Verdú. El portavoz de los constructores reconoce que la cercanía de las elecciones ha provocado que muchos consistorios hayan sacado las máquinas a la calle en los últimos meses para justificar la gestión del alcalde de turno pero también cree que su situación económica es mejor que la del Gobierno o la Generalitat.

«Muchos ayuntamientos han hecho los deberes y han logrado enderezar sus cuentas, por lo que ahora disponen de presupuesto para invertir», explica Javier Verdú. Por su parte, la Diputación provincial disfruta de una situación envidiable que le da, incluso, para reducir su deuda. En total, entre enero y septiembre municipios y Diputación licitaron nuevas obras por valor de 59 millones, un 251% más que en 2013.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats