Pocas novedades y casi todas concentradas en la mejora de las infraestructuras ferroviarias de Alta Velocidad: Corredor Mediterráneo y la finalización de la plataforma del AVE hasta Elche, cuya consignación presupuestaria se extiende hasta el año 2017. Este es el dibujo que ofrece el plan de inversiones del Ministerio de Fomento y sus empresas afines para el próximo año, según figura en el proyecto de Presupuestos que el Gobierno colgó ayer en su página web y la ministra de Fomento, Ana Pastor, presentó en Madrid.

Las cuentas para 2014 incluyen actuaciones por unos 186 millones, entre las que destacan los proyectos ferroviarios. Y, además, una grata sorpresa en el capítulo de carreteras: el Ministerio de Fomento retoma modernizar el tramo de la A-31 (autovía de Madrid) entre Alicante y Bonete, presupuestado en 2008 en 213 millones de euros, aparcado después durante cinco años y que ahora «reaparece» para el año que viene con una previsión de gasto de 12,7 millones de euros, cantidad que también se invertirá cada año hasta 2017. A partir de ahí la incógnita: el Gobierno no prevé tener lista la mejora de esta autovía hasta el año 2026. A más de uno le pillará jubilado.

El proyecto de Presupuestos para la provincia, por tanto, vuelve a estar marcado por la austeridad. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) se lleva la palma inversora con 127,7 millones para el Corredor Mediterráneo (Valencia-Alicante) -con 82,9 millones-; y a la línea de alta velocidad entre Monforte del Cid-Elche-Orihuela (incluidas estaciones), dotada con otros 44,2 millones. La estación intermodal de Alicante no aparece, tal como avanzó este periódico.

En cuanto al resto de actuaciones relacionadas con la infraestructura ferroviaria, el Ministerio de Fomento sólo consigna 100.000 euros para mejorar la red de cercanías; 50.000 euros para modernizar la línea Xátiva-Alcoy, y 468.000 euros para el «Tren de la costa», pero sólo entre Dénia y Gandía.

En conexiones viarias, la única sorpresa es la recuperación del proyecto para modernizar la A-31, una de las autovías más antiguas y con mayor tráfico de España. Gran asignatura pendiente del Gobierno en Alicante. La actuación tiene un coste de 213 millones a invertir hasta 2026 y recibirá sólo 12,8 millones en 2014. A partir de ahí, un año más vuelve a confirmarse el abandono que sufre la mejora de los accesos viarios al aeropuerto. El proyecto para desdoblar la N-338, que conecta la circunvalación con la N-332, sólo recibe 100.000 euros. Ni para pintar las señales horizontales. Aeropuerto que tampoco durante el ejercicio de 2014 verá acercarse el ferrocarril.

El presidente de la Generalitat anunció hace dos semanas que Fomento acometería en 2014 la variante de Benissa. No mintió, pero de un proyecto presupuestado en 2,2 millones tan sólo se consignan 200.000 euros. Los esfuerzos en materia viaria se centrarán en avanzar en dos obras también importantes. La ronda Sur de Elche, en ejecución, tendrá una inyección de 8,5 millones y la autovía de Font de la Figuera (A-33), que enlaza la A-31 con la A-35, con 12,7 millones. El resto cantidades menores para las variantes de Torrevieja y Altea. También figura la duplicación de la variante de Benidorm, con 4,2 millones de presupuesto pero, en principio, con la previsión de intentar acabarla en 2017. El resto de las inversiones se basarán en el mantenimiento de infraestructuras.

Ni un euro para la segunda toma del Júcar-Vinalopó

Un año de negociaciones entre la Junta Central de Usuarios del Trasvase Júcar-Vinalopó para recuperar la segunda toma del agua, y que el caudal sirva para regar y beber, no ha servido de nada. La sociedad estatal Acuamed no ha consignado ni un euro al trasvase y tampoco está claro de dónde sacará dinero para arreglar el embalse de San Diego (Villena), clausurado por filtraciones. Acuamed manejará de 17,7 millones. La macrodesaladora de Torrevieja contará con 7 millones para pagar el final de una obra de 271 y cuya agua rechazan los agricultores. La desaladora de Mutxamel tendrá un millón. 9,3 millones serán para reforzar el abastecimiento en Mutxamel y El Campello. Por último, figuran 1,7 millones de euros para el regadío del SAT San Enrique.