La gimnasta Sara Marín ha sumado un nuevo título al subir a lo más alto del podio en el Mundial de gimnasia rítmica para deportistas con Síndrome de Down disputado en Alemania. La ilicitana se ha convertido en ejemplo de superación y guía de otros deportistas, que como ella entrenan cada día para llegar a lo más alto. Sara abrió la puerta y, gracias al método que ha puesto en marcha en el CD Algar, también su compañera María Díez ha logrado el tercer puesto en el Mundial.

En Alemania Sara y María estuvieron acompañadas por Sergio de la Iglesia, que realizó una exhibición con el objetivo de promocionar este deporte entre los chicos. La delegación ilicitana estuvo encabezada por sus entrenadoras Titi Alberola y Lidia Marín.

Ya en el verano de 2016, Sara Marín enseñó en Florencia de lo que era capaz al conseguir cinco medallas de oro en la primera Olimpiada para personas con Síndrome de Down, los Trisome Games. Además, Marín ha sido once veces campeona Nacional en categoría individual de forma consecutiva desde 2008.

El esfuerzo de estos deportistas no tiene límites y se ve recompensado en la pista con el cariño de todos sus seguidores. Tanta dedicación bien merece una inversión económica a la altura, aunque ni los títulos libran al CD Algar de salir cada día en busca de patrocinadores.