Después de un largo y exitoso recorrido por el mundo del circo como compañía, con un premio Fetén y finalistas a los Max, entre otros reconocimientos, la Trócola pensó en la posibilidad de compartir su experiencia y utilizarla para abrir y facilitar el camino a otras iniciativas que quisieran triunfar en el mundo en el que ellos son expertos. De esta forma, la compañía alicantina creó en paralelo una productora, Producirk, una plataforma para la producción y distribución de espectáculos circenses a nivel nacional e internacional.
Empezó a funcionar en 2018, impulsada por Andrea Pérez y Jon Sádaba, socios también en la Trócola. En este año de funcionamiento han puesto en marcha e impulsado proyectos de compañías profesionales como Yolo, en cabezada por Lucas Escobedo, o eventos como Circarte. Eso además de ayudar y producir propuestas circenses emergentes, como Seu-Te! de Acrobàcia Mínima, o el primer espectáculo de la compañía de danza de Inma Cifuentes, Médula.
Ahora, Producirk da un paso más y ha asumido no solo el reto de llevar a escena su primera producción propia sino que se trata de su primer montaje de texto. Tupper Sex es el título de esta propuesta teatral, que se estrenará a nivel nacional en el Teatre Arniches de Alicante el próximo 31 de enero.
«Producirk nace en realidad con la idea de acompañar en un inicio a compañías de Alicante que están intentando profesionalizarse y que nos piden consejo», asegura Andrea Pérez. «Notábamos que hacía falta esa parte de acompañamiento para que supieran qué circuitos hay, cómo conseguir financiación, cuál es la mejor fórmula para poder tener todo lo que se necesita en un espectáculo...».
Se trata de ser «un puente entre lo profesional y lo amateur», afirma. «Les hemos ayudado a trazar las líneas que nosotros hemos seguido y basarnos en nuestra experiencia para producir sus espectáculos y acompañarlos. Por ejemplo, a Acrobàcia Mínima les guiamos hasta que una distribuidora se interesó por ellos».
También está el caso de El Fedito, con más de 15 años de trayectoria, con su espectáculo Oyun, que han producido y del que han gestionado toda la gira, que, de momento, ha cosechado seis premios en distintos festivales en toda España.
Y ahora afrontan su primera producción propia y, además, de texto. «La idea original de Tupper Sex sale de Jon. Él tuvo una idea creativa en la que le parece muy importante poner sobre el escenario lo que se va a ver en esta nueva producción. Me comentó el proyecto para ver si lo hacíamos porque nunca habíamos producido un montaje propio en el que nosotros no estamos en escena y además de texto, pero sabemos cómo se hace».
A ambos les pareció «una idea preciosa» y se pusieron manos a la obra para buscar el equipo necesario para llevarlo a escena. El texto lo firma Pepa Gil, partiendo de la idea de Jon Sádaba, y la actriz Inés Sanmartín lo lleva a escena, con dirección de Lucas Escobedo, «director de Yolo y de la Trócola», que tiene formación teatral. Además, en escena habrá una animación que acompaña a la actriz, que es de la Pata Brava, de Amaya Sanmartín.
«Teníamos un perfil muy concreto que encontrar para el papel porque está muy determinado por la obra, sabíamos la actriz que queríamos y quién debía ser», apunta Pérez.
Espectadores y clientes
Tupper Sex intenta poner en escena la realidad de las mujeres mayores de 60 años, lo que han vivido y lo que ha habido en su vida, «relatándolo en tono cómico y de humor». La historia es la de la una mujer de 64 años que se ha empoderado y ha decidido que necesita trabajar y poner en marcha su vida. No encuentra trabajo y lo que le ofrecen es ser comercial de tupper sex y dice que sí. «Lo que va a hacer es un tupper sex a los espectadores que se convierten en los clientes. Vemos a una mujer de 64 años hablando de sexualidad para mostrar qué ha pasado con esa generación en torno a la sexualidad, a la falta de sueños cumplidos, a la formación, a tener que cuidarse...». En su opinión, «cualquier espectador que la vea puede ver reflejada a su madre, su abuela, su tía y las mujeres en general.
Producirk se encuentra ahora en plena vorágine de los ensayos, que llegarán a su fase final en enero para su estreno el día 31. Y esperan que la andadura continúe por otros escenarios. «Por lo menos hemos abierto una puerta que antes estaba cerrada. Pero no sé si seguiremos produciendo más montajes de texto en el futuro. Nosotros funcionamos un poco por ideas, si nos viene una idea y nos parece buena e importante para comunicar en el escenario pues vamos a por ella. Si tiene texto, pues de texto, si es de circo, pues de circo».
