En plena resaca tras anunciarse su candidatura a la Alcaldía de Alicante por el PSPV, la siguiente incógnita que tiene que descifrar Paco Sanguino es hasta cuándo continuará al frente del Teatro Principal. Aunque son tenues las voces que apuntan o sugieren que debería dimitir del cargo que asumió en septiembre de 2015, el dramaturgo y profesor cree que el hecho de ir en una lista electoral no implica que deje la dirección del coliseo alicantino. «No veo que tenga que ser así, que tenga que dimitir, igual que tampoco veo que tenga que dimitir como miembro del Consell Valencià de Cultura o como vicepresidente de la Academia de las Artes Escénicas».

Sanguino afirma que su camino hacia las elecciones municipales del 26 de mayo «acaba de empezar» y que «se tomarán las decisiones que los propietarios estimen», aunque «lo que le interesa a la ciudadanía en este momento es el programa que voy a presentar y no dónde trabajo ahora».

Su contrato finaliza en septiembre, pero en el teatro le quedarían «como mucho» cuatro meses, aunque la programación ya está cerrada y presentada hasta diciembre. No obstante, recuerda que ahora son tres los propietarios del Principal, con la reciente incorporación de la Generalitat, «y entiendo que es una decisión que han de tomar los propietarios en lo que estimen oportuno; yo haré lo que me digan que tengo que hacer».

En su opinión, «poner el foco en si estoy en el Teatro Principal o no es lo de menos». Además, apunta que «de hecho oficialmente todavía no soy candidato de nada; hay que seguir el procedimiento normativo y ahora mismo sigo siendo director del Principal y un candidato nombrado».

Fuentes cercanas al equipo de gobierno municipal señalaron el lunes que «lo lógico» sería que abandone su puesto. Esto conllevaría el nombramiento de un nuevo director tan solo hasta mayo, ya que posteriormente sería designado el gestor definitivo por parte de los nuevos gobernantes salidos de las urnas. «Yo creo que es una decisión que se ha de reflexionar, tendrán que hacerlo las tres partes de la propiedad. O a lo mejor no tienen nada que reflexionar y quieren que siga».

Sin embargo, (según informa Carolina Pascual) el portavoz adjunto del gobierno municipal, Israel Cortés, dejó ayer en manos de Sanguino su futuro como director del teatro. «La responsabilidad es suya, tiene que valorar si es compatible con su cargo de alcaldable», señaló durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, en la que subrayó que el Gobierno de Luis Barcala estará «vigilante» con su trabajo si decide no dejar un cargo que ocupa desde la llegada del tripartito de Alicante: «Velaremos para que cumpla con su responsabilidad en el Teatro Principal, con su horario laboral y los objetivos».

Sanguino reiteró que no hay «nada decidido», pero que en cualquier caso «es cierto que el proyecto que me encomendaron hace casi cuatro años se ha cumplido y de este tenemos que felicitarnos porque el teatro es hoy más público que privado, ya que el Sabadell siempre ha tenido el comportamiento de que lo es. Creo que se ha acabado esta singladura con éxito. Otra cosa es que obviamente habrá que abrir otro proyecto respecto al Principal cuando tengamos un gobierno de la ciudad en marcha».

Destaca que en el Principal lleva tres años, pero que su proyecto para Alicante es producto «de una experiencia profesional de mucho años en ámbitos muy diferentes al teatro, pero sí que he aplicado a este trabajo todos mis conocimientos de tecnología aplicada», ya que ha sido subdirector de Contenidos y Formación de Universia del Grupo Banco Santander (2002-2006) y responsable de proyectos internacionales de la Universidad de Alicante como el OpenCourseWarekh.

«He tenido la suerte de tratar en estos tres años con prácticamente 300.000 personas y a mí también me ha supuesto un descubrimiento saber lo que quieren los alicantinos; eso no se puede conseguir en un despacho o en una oficina». Asegura estar contento de que el paso a la política sea desde el Principal, «porque demuestra que la gente de la cultura cuenta, que somos profesionales y somos importantes en el tejido de la sociedad, eso es algo muy relevante que no sucede a menudo».