La gran cita con el arte contemporáneo, la feria internacional ARCO 2014, comienza hoy en Madrid con la participación de algunos artistas alicantinos veteranos -Mira Bernabeu, Daniel García Andújar y Antonio Alcaraz- y el debut de la galería Aural que recupera después de muchos años la presencia alicantina en este encuentro.

El artista Mira Bernabeu (Aspe, 1969) lleva más de quince años presente en ARCO aunque ahora se estrena con la galería Rosa Santos de Valencia, con la que presenta un proyecto de seis fotografías, La genealogía de la consciencia III, desarrollado a lo largo de varios años y terminado en 2012.

«Son imágenes de pequeño formato. Es una cuestión conceptual, ya que el formato grande me parece excesivamente publicitario, y el espectador invierte menos tiempo en visualizar la obra», explica. Acostumbrado a utilizar el cuerpo humano en sus imágenes y aportar su visión social y antropológica, su proyecto -en el que han participado actores con máscaras- es «muy teatral y tiene un componente bastante político» para reflejar «cómo se repiten los arquetipos en las protestas sociales y en las reivindicaciones, así como la ofensiva del poder cuando la gente se manifiesta».

Mira Bernabeu también acude como galerista al frente de Espaivisor e indica sobre sus expectativas que «el año pasado fue muy bien, no fue un desastre, tanto por coleccionistas extranjeros como nacionales, así que con que vaya igual, firmamos», tras añadir que «antes el 50% del negocio se gestionaba en ARCO pero ahora hacemos ocho ferias al año».

Otro artista habitual en esta cita, Daniel García Andújar (Almoradí, 1966), presenta con la galería Casa sin Fin, un nuevo trabajo, «una instalación de corte clásico y estético muy simple, con 27 impresiones en A3 de documentos desclasificados por el Gobierno de EE UU sobre el atentado de Bengasi (Libia) en 2012». Andújar apunta que en España el acceso a este tipo de información es muy limitado en comparación con EE UU pero «estos documentos no muestran casi nada, ocultan más de lo que enseñan y sólo nos dejan ver algunas frases sueltas, lo que refleja la hipocresía del estado de la transparencia». El artista también lleva a ARCO el vídeo Ciudadano armado, de 1998, una especie de bases de datos de los inicios de Internet, que proyecta imágenes de pistolas que se pueden comprar online como objetos de deseo.

Andújar ve «cierto optimismo» en ARCO, «a ver si es real», frente a la «depresión del pasado año». Indica que la reducción al 10% del IVA en el arte «es más un elemento de propaganda del Gobierno que otra cosa porque sólo se aplica en venta directa del artista al cliente, que no se hace nunca, pero luego la galería lo vuelve a aplicar al 21%».

Antonio Alcaraz (Alicante, 1963) acude con la galería castellonense Cànem con un conjunto de dibujos en blanco y negro de su exposición Carbón y acero, que tienen una parte fotográfica con serigrafía y grafito. Él, que trabaja la arqueología industrial de patrimonio abandonado, muestra «detalles pequeños de piezas mayores reconocibles» y confía, más que en la ventas, «en los contactos que surgen entre galerías».

La galería Aural presenta en el programa Solo Projects Focus Latinoamérica una muestra de los trabajos más emblemáticos de la brasileña Anna Bella Geiger.