Arranca la temporada estival y con ella se ha vuelto a poner en marcha la zona naranja en la Cala de La Vila Joiosa. Una medida que incluye el pago del estacionamiento regulado todos los días de la semana y de 9.00 a 20.00 horas. Así, el pasado 15 de junio fue el primer día de implantación y, como ya ocurrió el pasado año, algunas de las plazas de parking más cotizadas en esta zona de playa han aparecido vacías en estos primeros días de puesta en marcha.
Como ya ha ocurrido otros años, no aparcar los vehículos en estas plazas es un modo de «protesta encubierta» de los residentes que llevan desde hace dos años rechazando la medida. Ayer, la mayoría de las plazas estaban vacías de coches en algunas horas del día, y todo a pesar de que era día de mercado, una jornada en la que La Cala suele llenarse de coches. A primera hora, sOlo las furgonetas de los vendedores ocupaban algunas de las plazas en el aparcamiento de primera línea.
Pero eso no es todo. La nueva temporada de zona naranja ha vuelto a poner en pie de guerra a los vecinos que, al comprobar cómo iban a pintar de nuevo las líneas de este color en varias calles de La Cala vilera, mostraron de nuevo su rechazo como otros años. Desde una de las asociaciones de vecinos de este barrio de La Vila explicaron que «no queremos pagar en nuestras calles» y mostraron su descontento por una medida que es el tercer verano que se lleva a cabo. El verano de 2017 incluso recogieron firmas y presentaron una queja al Síndic, pero no evitó la implantación.
En concreto, las calles de pago son Mariners, Mitgjorn, Marinada, Llebeig, Rosa de los Vientos y el aparcamiento en primera línea de playa. Este último se estrenó el pasado año como zona de pago regulado después de que el Ayuntamiento de La Vila decidiera pintar de naranja esta zona y quitar los aparcamientos de este color de la calle Tramuntana, donde cada martes y sábado hay mercado y las noches de verano lo hay también nocturno.
Así, en La Cala hay unas 150 plazas de zona naranja en las que vecinos y turistas tendrán que pagar todos los días de la semana (de lunes a domingo) de forma ininterrumpida de 9.00 a 20.00 horas. Pero además, lo harán por 90 céntimos por hora, 10 céntimos más de lo que cuesta en otras calles del casco urbano. Y todo ello durante tres meses, hasta el 15 de septiembre. Y todo ello a sOlo un paso de Finestrat, donde existe un aparcamiento y toda la primera línea pintada de blanco, es decir, para aparcar sin pagar.
Una medida implantada en 2017 para paliar el desequilibrio de la empresa
El Ayuntamiento aplicó la zona naranja en La Cala en verano también para la rotación ante la falta de aparcamientos
El pago de estacionamiento regulado o zona naranja de La Cala de La Vila Joiosa nació en el verano de 2017. La razón: paliar de alguna forma el desequilibrio económico de 40.000 euros de la empresa concesionaria, Pavasal, según recogía el informe municipal para justificar la ampliación de la concesión.
Así que este es el tercer verano que se pone en marcha en esta zona de playa donde el tránsito de vehículos en época estival se multiplica y donde los turistas y vecinos aparcaban en primera línea, al lado de la arena, sin pagar. Y esa era también una de las razones esgrimidas por el Ayuntamiento. La falta de aparcamiento en los momentos de mayor afluencia fue también esgrimida como razón para aplicar este servicio ya que el pago de estacionamiento regulado debe fomentar la rotación de vehículos durante las horas en las que se paga.
Con todo, el verano pasado se cambió la zona naranja de la calle Tramuntana al aparcamiento de primera línea de playa. Según explicaron desde el Consistorio en ese momento, no tenía sentido pagar en otras calles de La Cala por aparcar y no hacerlo prácticamente al lado de la arena, un sitio privilegiado para aquellos que acuden con sus vehículos a la playa o a los establecimientos de la zona.
Pero además, en la calle Tramuntana dos días a la semana hay mercado por la mañana y en las tardes y noches de verano se coloca otro. Así que parece que no era el mejor sitio para tener estacionamiento regulado si apenas se podía usar.
