Abandonado a su suerte desde hace dos décadas por los incumplimientos de su antiguo agente urbanizador y convertido prácticamente en un gueto de casas okupadas por familias en situación de exclusión, el plan parcial 1/1, actualmente denominado Ensanche Levante y que se despliega sobre los terrenos de la partida Armanello, está llamado a convertirse muy pronto en el principal pulmón verde de Benidorm. Esa es, al menos, la intención de sus promotores, una Agrupación de Interés Urbanístico (AIU) de la que forman parte casi del 80% de sus propietarios que, hartos de esperar y ver que no pasaba nada, decidieron pasar a la acción y tomar las riendas para hacer suya la urbanización de este sector, que representa la mayor bolsa de suelo aún por desarrollar de la ciudad.
El proyecto de urbanización prevé destinar casi un tercio del total de su superficie a la creación de un gran parque urbano. Así se recoge en la documentación a la que ha tenido acceso este diario, según la cual de los cerca de 575.000 metros cuadrados de extensión total, 175.000 irían destinados a la creación de zonas verdes y equipamientos, al margen de las previstas para viales y otro tipo de dotaciones. La superficie reservada para este espacio verde convertiría al del Ensanche de Levante en el mayor parque de la ciudad, al superar en extensión a los otros dos de mayor tamaño: el de l'Aigüera, construido a finales de los años 80 del pasado siglo y que tiene una extensión de 120.000 metros cuadrados; y el de Foietes, inaugurado hace ahora año y medio y que ocupa una superficie de unos 115.000 m2.
Ésta no será la única dotación pública prevista en las Bases Técnicas de Ordenación. Además de las zonas verdes y de equipamientos y las reservadas para viales, también se prevé la reserva de 21.000 metros cuadrados para la construcción de infraestructuras educativas con las que cubrir las necesidades de colegios, institutos u otro tipo de centros de enseñanza que puedan surgir una vez que se desarrolle el sector y, con él, la construcción de nuevas edificaciones. No en vano, ésta es una de las grandes carencias existentes en la zona de Levante, donde no hay ni un solo centro educativo público en el radio que abarca desde el complejo escolar del Salto del Agua hasta las faldas de la Serra Gelada, y que se vería ahora agravada con el aumento poblacional que propiciará este plan parcial.
Torres de más de 20 alturas
Aunque hasta el momento no está del todo definido el incremento del parque de viviendas que aportará el desarrollo de Ensanche Levante, la cifra podría acercarse a los cerca de 4.000 apartamentos que el Ayuntamiento de Benidorm ya aprobó en su día con el antiguo plan parcial. Entonces, la previsión pasaba por levantar en la zona un total de 23 torres de hasta 29 alturas. Sin embargo, el proyecto nunca llegó a ejecutarse por los continuos incumplimientos de su antiguo agente urbanizador, el controvertido empresario alicantino Enrique Ortiz, al que el consistorio apartó en 2015, pero que sigue vinculado al plan por ser aún propietario de una parte del suelo.
Según la previsión que manejan ahora los promotores, las futuras edificaciones tendrán un mínimo de 20 plantas gracias a la libertad de alturas que el Plan General concede a la mayoría de sectores urbanísticos de la ciudad. De hecho, entre los grandes retos existentes desde el minuto uno en este plan estaba el de replicar el modelo urbanístico ya vigente en el resto de la zona de Levante: la creación de una malla ortogonal viaria que conforma manzanas de usos mixtos residenciales y hoteleros, con un fuerte componente comercial en la calle y una edificación con tipología de bloque abierto y de notable altura.
De ahí, según sus promotores, la importancia del parque que prevé ahora este proyecto. Fuentes la agrupación de propietarios explican que esta zona verde vendría a resolver un hándicap dotacional que presenta el modelo urbano de Levante: «La ausencia de un gran parque urbano de rango ciudad, alternativa al 'parque' que en sí representa, si bien de forma limitada, la propia playa de Levante».
Objetivo: 2020
Aunque las bases de ejecución del plan parcial cuentan ya con el visto bueno de Ayuntamiento y Generalitat, el mismo está ahora a la espera de la redacción de todos los informes sectoriales que deben realizar las distintas consellerias y otras administraciones como paso previo para su desarrollo. La AIU quiere iniciar las obras en 2020, aunque los plazos finales dependerán del tiempo que tarden en llegar todos esos informes.
