El grupo municipal de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Benidorm será, finalmente, el encargado de presidir el órgano para investigar a fondo el expediente de la estación de autobuses de la ciudad turística. Se trata de uno de los procedimientos administrativos más controvertidos del Consistorio, de ahí que la oposición pidiera crear una comisión para poner luz sobre el mismo que, al fin, ha echado a andar esta mañana con Cs al frente.

Así, la primera sesión de este órgano tenía un único punto en el orden del día, decidir qué grupo se encargaría de presidir la comisión. Un asunto no exento de polémica si se tiene en cuenta que la decisión de los grupos de la oposición de incluir en el acuerdo de constitución del ente al portavoz del grupo socialista, Rubén Martínez, como presidente y al portavoz adjunto de Cs, Juan Balastegui, como vicepresidente impidió iniciar las reuniones durante un mes por las advertencias del secretario sobre la ilegalidad de la decisión.

En el último pleno, la comisión volvió a aprobarse, esta vez sin nombres para ocupar los cargos de mando. El acuerdo pasaba por decidir en la primera sesión del ente quién se pondría al frente y, finalmente, será Cs. Los populares, que gobiernan en Benidorm en coalición con CBM, se han echado a un lado y han propuesto a Balastegui como presidente y a la concejal de CBM Paquita Ripoll como vicepresidenta.

La idea del ejecutivo local ha sido acatada por la oposición sólo a medias puesto que, finalmente, el PSOE se ha quedado con la vicepresidencia que estará en manos de la edil Cristina Escoda. El portavoz socialista ha justificado la decisión por "cuestiones de paridad". Así, finalmente, Martínez no presidirá la comisión, como se planteó inicialmente, y se limitará a ejercer de portavoz de su grupo, que pese a ser el mayoritario en la oposición no preside el órgano.