Benidorm ha vuelto a vibrar durante la segunda mascletà de sus Fiestas Mayores Patronales que rinden hoy tributo al patrón de la ciudad turística, Sant Jaume. Miles de personas han abarrotado la avenida Jaime I y las calles anexas para disfrutar del disparo a cargo de los valencianos Pirotecnia Ricasa, que en esta ocasión ha empleado 80 kilos de pólvora para el potente estruendo que ha arrancado puntual a las 14.00 horas.
Las reinas de las Fiestas Mayores Patronales, Fátima Carrobles y Anna Calbo, han sido en esta ocasión las encargadas de encender la mecha que, después, ha prendido el potente estruendo. Una imponente traca valenciana, prendida por las representantes festeras, que ha otorgado un toque tradicional al resto del disparo, programado de forma digital.
Una secuencia de disparos aéreos han constituido la apertura de la mascletà. Los destellos rojos y blancos han iluminado el cielo de Benidorm en honor a Sant Jaume para después dar paso a un imponente disparo bermellón que ha cubierto el cielo del color del Patrón de la ciudad turística.
La parte terrestre del disparo ha hecho temblar el suelo y ha mantenido el cielo vibrante con un acompañamiento de fuego aéreo para concluir con un terremoto final que ha dejado boquiabierto a los miles de asistentes, entre otras cosas, por el juego color que se ha dibujado en el cielo, donde ha vuelto a predominar el rojo en honor a Sant Jaume.
En esta ocasión el disparo ha rozado los cinco minutos de duración. "Ha sido un poco más corto que el de ayer pero igual de intenso", ha señalado Fernando Trotonda, de la valenciana Pirotecnia Ricasa.
Además de peñistas, vecinos y visitantes la mayoría de ediles de la Corporación local no ha querido perderse el disparo. Así, el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, junto al edil de Fiestas, Jesús Carrobles, y el resto de ediles del PP han presenciado desde primera fila el espectáculo. También los ediles del PSOE han estado presentes acompañados por el portavoz socialista de la Diputación, José Chulvi, que ha visitado hoy Benidorm durante sus días grandes.
