Nueve fiestas y un gran desfile por la playa de Levante. Benidorm volverá a ser la próxima semana el epicentro del colectivo LGBTI, con la octava edición del Pride, una celebración que este año se ha lanzado a intentar incrementar la presencia de público nacional.
Este evento reunió el pasado año a unas 25.000 personas de entre las que 15.000 eran extranjeros y 10.000 visitantes nacionales. Por ello, la organización se ha propuesto para esta edición aumentar este último tipo de turistas además de batir récords de público asistente.
Así lo avanzaron ayer el concejal de Eventos y Festivales, José Ramón González de Zárate y uno de los promotores del mismo, Geoff Garland. Para ese incremento nacional, la organización ha apostado por la colaboración con «marcas importantes en el ambiente nocturno LGBTI» que «arrastran a muchísimos seguidores en sus redes sociales» además de una amplia promoción durante el año.
Aunque el grueso de las actividades se concentrará del 5 al 9 de septiembre, con hasta nueve eventos diferentes, los días 3 y 4 habrá fiestas temáticas en los locales del Casco Antiguo, que un año más se tematizará y ambientará para festejar el Orgullo. Además, el martes 4 se celebrará la presentación del Pride a las 20.00 horas en el Hotel Melina. Como en ediciones anteriores, el Orgullo tendrá su propio desfile: el «Parade», en el que participarán carrozas, coches e incluso caballos, y que recorrerá la playa de Levante desde El Rincón de Loix, para a través de las avenidas Europa, Mediterráneo y Aigüera llegar hasta el auditorio Julio Iglesias. La programación se puede consultar en la guía del Pride, de la que se han editado 10.000 ejemplares.
El concejal de Eventos incidió en que el Benidorm Pride es «reflejo de la ciudad abierta que somos» así como un reclamo muy importante para captar al turismo LGBTI; y añadió que con el paso de las ediciones se ha constatado «que el grado de fidelidad es elevado, ya que muchos de los que descubren nuestra ciudad vuelven». Además, subrayó que el alto número de eventos y actividades que se desarrollan durante el Pride, hace que los asistentes «pasen la jornada completa en Benidorm, hospedándose en nuestros alojamientos turísticos y consumiendo en nuestros establecimientos».
Garland, por su parte, afirmó que esta edición del Benidorm Pride «va a suponer un antes y un después», con una programación que conserva lo mejor de años anteriores y que suma también nuevas actividades hasta alcanzar nueve fiestas, parte de ellas gratuitas. El organizador ha asegurado que el Pride es un evento «family friendly», y también «la semana más importante del año en términos económicos» para los locales de ambiente del Casco Antiguo.
