Apenas se ha iniciado la negociación pura y dura para la actualización del convenio, pero la patronal del sector de la hostelería en la provincia ya ha levantado un muro entre sus intereses y las exigencias de los sindicatos. Así lo hicieron saber ayer desde la parte empresarial a los representantes de los trabajadores en el transcurso de un encuentro de la mesa negociadora celebrado en las instalaciones de la Institución Ferial Alicantina (IFA), donde los empresarios calificaron de «exagerada» e «inasumible» muchas de las propuestas recogidas en la plataforma sindical que pretende revisar las condiciones laborales de algo más de 40.000 trabajadores de hoteles, bares, restaurantes, comedores, servicios de catering y otros negocios relacionados con la hostelería en la provincia de Alicante.
Entre ellas, uno de los caballos de batalla será sin duda el incremento salarial reclamado por la parte social. Como ya contó días atrás este diario, Comisiones Obreras (CC OO) y UGT, los dos sindicatos mayoritarios con presencia en la negociación, han planteado la aplicación de una subida de sueldos de un 8% aplicable en un plazo temporal de 3 años: un 3,5% a aplicar en este año 2017 y, además, con carácter retroactivo a 1 de enero; un 2,5% para 2018 y, por último, otro 2% que se sumaría a las nóminas a partir del 1 de enero de 2019, el último año en el tendría vigencia el convenio.
Desde los sindicatos defienden esta petición, unida a otras mejoras que quieren que se actualicen o se incorporen al convenio, asegurando que es «de justicia» que las condiciones laborales del sector mejoren de la misma manera en la que lo han hecho los índices de ocupación y, sobre todo, de rentabilidad de las empresas turísticas en los últimos años. Y, además, recuerdan que tras los años de congelación salarial, «ya toca» equiparar los sueldos de los trabajadores y ponerlos al día para que no sigan perdiendo poder adquisitivo.
Mucho dinero, poca vigencia
Frente a las propuestas planteadas por CC OO y UGT, fuentes de la asociación turística Hosbec, la de mayor peso en el sector de la hostelería provincial, consideraron que tanto el incremento salarial demandado como el resto de condiciones planteadas por los sindicatos tendrían un «coste muy elevado que no todas las empresas son capaces de asumir».
Desde Hosbec apuntaron a que, aunque no están cerrados a una revisión de los salarios, esta medida no es la única planteada que gravará en buena medida los costes laborales, puesto que la plataforma sindical incluye otras muchas peticiones que, a su juicio, también tendrán un importante coste económico. Entre ellas, se refirieron al incremento de horas sindicales, excedencias, de días de libranza por festivo trabajado o más permisos retribuidos; completar hasta el 100% el subsidio por expedientes temporales de regulación de empleo (ahora, en el 70%); incrementar un 7% la paga extra de octubre para todos los trabajadores; poner coto a la externalización de servicios y otras medidas reclamadas por los sindicatos que, para Hosbec, tendrán un «importante impacto» sobre las empresas en las que es de aplicación este convenio colectivo.
Aunque afirman que todavía no se han sentado a hacer números y calcular al céntimo qué repercusión económica tendrían todas estas peticiones en las cuentas del sector, desde la patronal sí que avanzaron que la aplicación de todas o la mayoría de ellas podría traer aparejado un incremento anual de los costes laborales por encima de un 10% en el caso de un hotel «estándar».
Igualmente, consideran que los tres años de vigencia propuestos para este convenio son un periodo de tiempo muy corto, por lo que los empresarios defenderán un documento, como mínimo, para cuatro años con el fin de asegurarse la paz social durante un periodo bastante más duradero.
Próximo encuentro
Fuentes sindicales lamentaron ayer que, al margen de explicar los motivos de su propuesta de incremento salarial y de que los empresarios avanzaran su opinión sobre la misma, aunque sin realizar todavía ninguna contraoferta, la reunión de ayer apenas sirvió para avanzar. Por eso, avanzaron que en próximos encuentros exigirán mayor premura a la patronal para no demorar mucho más en el tiempo una negociación que se inició hace ahora seis meses, en noviembre de 2016. La previsión pasa por volverse a reunir en dos semanas, cuando estaremos ya prácticamente a las puertas de que comience la temporada alta.
