El Ayuntamiento de La Vila Joiosa y los vecinos del Casco Antiguo se pusieron ayer de acuerdo con el Plan Especial de protección y conservación de la ciudad histórica que tiene como objetivo convertirla en Bien de Interés Cultural (BIC). Durante la Comisión de Urbanismo que se celebró en el Consistorio en la mañana de ayer estuvieron presentes representantes de las asociaciones de vecinos de la zona para aportar su punto de vista.
Así, todas las partes concluyeron lo siguiente: el gobierno local llevará a pleno la próxima semana el plan especial sin incluir las alegaciones de los vecinos. A cambio, se comprometen a revisar las reclamaciones que les presenten durante su primer año en funcionamiento.
No obstante, el edil de Urbanismo, Jaime Ramis, indicó a este diario que ya se les ha tenido en cuenta durante todo este tiempo. «Los técnicos municipales ya han estudiado las reclamaciones vecinales, y no las han considerado oportunas», explicó el concejal.
A pesar de ello, confirmó que quieren darle «un año de rodaje» para comprobar su funcionamiento y pulirlo porque se trata de «un proyecto dinámico y vivo», tal y como lo definió el concejal del área. Asimismo, en ese periodo el Consistorio volverá a estudiar todas las peticiones vecinales «no tenemos problema por eso, aunque entendemos que habrá que modificar casos puntuales y no lo que ya se ha desestimado por Ayuntamiento y la Generalitat». Cabe señalar que a Conselleria se envía el Plan Especial junto a las alegaciones desestimadas por si tiene que cambiar algo del proyecto desde Valencia.
Los vecinos alertaban con sus peticiones, por ejemplo, que se puede poner en peligro las casas colgantes atendiendo al artículo 9. Éste hace referencia a la eliminación de los elementos impropios. Y según los vecinos, en caso de que se hiciera una rehabilitación integral, los voladizos desaparecerían.
Con todo, en el pleno de la semana que viene debatirán la ratificación del mismo Plan Especial provisional que ya se aprobó en octubre de 2014, según apuntó Ramis, salvo las modificaciones y alegaciones que sí que han incluido para cumplir con los informes sectoriales.
Inversión
La ratificación será el 21 de abril. Es decir, año y medio después de su aprobación provisional y 12 años después de que se iniciaran los trámites por los que han invertido cerca de 140.000 euros, según los cálculos de Jaime Ramis.
Aún con todo este tiempo, ahora les toca hacerlo todo a contrarreloj. Tal y como indicó el concejal, el plazo para que el Consell se pronuncie acaba en mayo. Hace unos cuatro meses pidieron una prórroga de 2 años por si no les daba tiempo «pero no nos han contestado», indicó el concejal. En caso de que no se apruebe el definitivo dentro del plazo, el Casco Antiguo quedaría desprotegido. Cabe recordar que desde 2014 están suspendidas las licencias y declaraciones responsables en el ámbito del Plan Especial, admitiéndose licencias de obras compatibles con el planeamiento vigente (PGOU) y el propuesto.
Dulce Beviá Jiménez
