El Ayuntamiento de Alicante ha acordado recurrir la sentencia del ruido que le ordena establecer una zona acústica saturada con medidas ambientales para reducir los decibelios en once calles del Centro Tradicional pero se compromete a iniciar los trámites para implantar ese instrumento de control del ruido. El equipo jurídico municipal discrepa sobre la vulneración de derechos fundamentales que establece la sentencia, y así lo refleja en el informe solicitado por el ejecutivo local.

El equipo de gobierno ha trasladado esta tarde a vecinos y hosteleros la decisión y emplaza a ambas partes a buscar puntos de encuentro. El Ayuntamiento tiene la intención de hacer extensivas a otras zonas de la ciudad, como el Casco Antiguo, las medidas que hagan posible la convivencia.

Estas decisiones se han comunicado en sendas reuniones con ambos sectores enfrentados para tratar la reciente sentencia sobre el ruido y las medidas a adoptar para conciliar el derecho al descanso de los vecinos con una oferta de ocio acorde a una ciudad de las dimensiones de Alicante. Han participado el alcalde de Alicante, Luis Barcala, acompañado por los concejales de Medio Ambiente, Manuel Villar; Ocupación de la Vía Pública, Manuel Jiménez; Urbanismo, Adrián Santos; Seguridad, José Ramón González; Comercio, Lidia López; y Antonio Peral, edil de Modernización, Estadística y Coordinación de Proyectos. También han asistido técnicos de diferentes áreas.

En el encuentro, el alcalde ha trasladado a las partes que el departamento jurídico municipal ha recomendado recurrir la sentencia al discrepar sobre la vulneración de derechos fundamentales que se establece en la misma, con lo que se presentará el correspondiente recurso en paralelo al inicio de los trámites para crear una Zona Acústicamente Saturada en la zona delimitada por la decisión judicial.

Es decir, que se van a impulsar las medidas de control del ruido, reducción de veladores, control de horarios y suspensión de licencias de pubs en la zona, encaminadas a la implantación de una ZAS; al tiempo que se va a presentar un recurso a la sentencia judicial porque hay cuestiones jurídicas, como la vulneración de los derechos fundamentales, que el Ayuntamiento considera que son matizables.

Para el alcalde "no es incompatible recurrir la sentencia por los motivos argumentados por los servicios jurídicos municipales y, simultáneamente, adoptar medidas que compatibilicen los intereses de vecinos y empresarios. Somos conscientes de que hay que adoptar medidas que aseguren la convivencia, y ya trabajábamos en las mismas con independencia de la demanda; por ello, y si perjuicio de recurrir la sentencia, las aplicaremos".

Por otra parte, el equipo de gobierno ha manifestado su intención de hacer extensivas las medidas que compatibilicen el ocio con el descanso a otras zonas de la ciudad, como puede ser el Casco Antiguo, buscando con ellas garantizar unos controles sobre el ruido que permitan la convivencia entre vecinos y hosteleros.