El temporal también ha pasado factura al colegio Las Bayas de Elche, donde han tenido que improvisar un aula en los pasillos. Dos de los barracones en los que se imparte clase en esta pedanía han quedado inutilizados por los efectos de la gota fría, al llenarse el suelo de agua. Además, padres del centro achacan este problema «al retraso de la obra que tiene que acabar con la presencia de las aulas prefabricadas en el colegio».

Las lluvias afectaron al suelo de dos de las aulas, dejándolas inservibles hasta que se renueve, y, por este motivo, el centro ha tenido que realojar a dos aulas en otros espacios. Uno de los grupos está dando clase en un pasillo, en unas condiciones que las familias rechazan, y el otro ha sido reubicado en el aula de música.

El malestar entre los padres del colegio es tal que el pasado lunes solo se presentaron en las aulas el 10% de los escolares. El 90% restante se quedó en casa por temor a que las aulas no estuviesen en condiciones.

Ahora, pasados unos días, los alumnos han regresado al colegio, pese a que dos grupos se han quedado sin aula, hasta que la Conselleria de Educación dé una solución a las instalaciones afectadas. Ayer se empezó a desmontar el suelo de las aulas afectadas, lo que, apuntaron desde la Ampa, «ha sacado a la luz la humedad y la suciedad sobre la que están las aulas prefabricadas».

Esta situación ha calentado, y mucho, los ánimos de las familias, que reclaman que se dé prioridad al proyecto incluido en el Plan Edificant que tiene que dar una solución a la falta de espacios en el colegio de Las Bayas.

Ayer por la mañana, animados por la Ampa del colegio, los padres improvisaron una protesta, después de ver cómo estaba el suelo de los barracones más afectados.

Por otro lado, el colectivo de madres y padres del colegio Las Bayas ha anunciado protestas diarias en la puerta del colegio, que tienen previsto realizar cada mañana a las 8.55 horas, antes de que empiecen las clases, para reclamar a la Conselleria de Educación y al Ayuntamiento que se agilicen los trámites necesarios para ampliar este colegio público, y desmontar los barracones en los que actualmente reciben clase más de un centenar de alumnos de varios niveles.

De una forma y otra, en la pedanía destacaban ayer que «la gota fría también ha servido para evidenciar el mal estado de los barracones donde estudian nuestros hijos».