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El retraso de la reforma de la Explanada amenaza la temporada alta hostelera

El gobierno estima que la actuación en mitad del paseo, que durará seis meses, se iniciaría «si todo va bien» en enero, afectando así a Semana Santa y Hogueras

Tramo de la Explanada que será reurbanizado en unas obras que se prolongarán seis meses. rafa arjones

La segunda fase de las obras en el lateral de la Explanada amenaza a los bares y restaurantes, además de otros negocios de perfil turístico situados en el tramo del emblemático paseo entre Canalejas y la Rambla. Y es que, según la vicealcaldesa y portavoz del equipo de gobierno, Mari Carmen Sánchez (de Ciudadanos), la actuación que tiene un presupuesto de 1,5 millones de euros afectaría a dos períodos clave en la viabilidad económica de los locales de la zona: la Semana Santa y las Hogueras. «Si todo va bien, en principio, [el inicio de las obras] sería en enero», señaló Mari Carmen Sánchez tras la Junta de Gobierno en la que se dio luz verde a la licitación de una actuación que completará la realizada en el tramo lateral de la Explanada situado entre la Rambla y la Puerta del Mar.

Estaba previsto, en un principio, que las obras arrancasen tras este verano con el objetivo de causar el menor perjuicio a los comerciantes de la zona, según anunció la anterior concejala de Urbanismo, la popular Mari Carmen de España. Ahora, según Sánchez, se apunta a enero, aunque el actual concejal de Urbanismo, Adrián Santos (de Ciudadanos) subrayó ayer que la fecha está aún en el aire, a la espera de una reunión que prevé mantener con los negocios del tramo de la Explanada afectado por las obras.

Por otro lado, el concejal de Urbanismo resaltó ayer la importancia del proyecto que «pretende renovar y reurbanizar este tramo del paseo de la Explanada, para conseguir una mejora de la capacidad importante del terreno y la renovación del pavimento». Para ello, el Ayuntamiento parte de la anterior fase de las obras, «continuando con las mismas soluciones de diseño, estándares de urbanización, mobiliario y calidades de los materiales, así como con la misma solución de mejora portante del terreno subyacente». Según el concejal de Cs, «se proyecta una actuación de continuidad para que toda la zona tenga una imagen única y homogénea».

Desde el área de Urbanismo se subraya que el objetivo del proyecto es «continuar» con la ordenación de las concesiones de veladores existentes, que ya se acometió en la primera fase, «implantando los elementos de cubrición y las instalaciones necesarias, de manera organizada y coordinada, siguiendo las directrices del Servicio Municipal de Ocupación de Vía Pública, y haciendo una previsión de las posibles futuras necesidades, para integrarlas en lo posible en la actuación».

El edil Santos añadió ayer que «se procurará» la «máxima integración entre la zona central de paseo y el ámbito de la actuación, potenciando los tránsitos peatonales hacia las bocacalles transversales, para conseguir interacción en el uso de las zonas de paseo y las estanciales». Lo que se busca, según prosiguió, «es conectar la zona centro de la ciudad con el puerto y el paseo marítimo, ya que es una de las zona más representativa de la ciudad por estar enfrente del mar».

Hace ahora cinco meses, la Junta de Gobierno aprobó un paso administrativo previo, el proyecto técnico, tras resolverse las alegaciones presentadas por la Asociación de Comerciantes Corazón de Alicante y la Plataforma Comarcal por la Movilidad Sostenible de l'Alacantí, tras concluir el período de exposición pública.

En ambos casos, los técnicos aceptaron parcialmente las propuestas, ya que se consideró que ya estaban recogidas suficientemente en el proyecto. Otras, como la conexión con la calle Bilbao, el gobierno señaló que está previsto incluirlas en redacción del futuro proyecto de la fase 3. Alegaciones presentadas, referentes a la creación de un nuevo itinerario ciclista en la fachada litoral o los sistemas de sombra estandarizados, se rechazaron al exceder el ámbito de actuación del proyecto.

La propuesta que se acometerá contempla crear accesos más amplios y practicables para personas con movilidad reducida, respetando los elementos protegidos del paisaje como el pavimento o las palmeras. Asimismo, está prevista la realización de nuevas instalaciones de drenaje urbano que canalicen el agua pluvial.

Otro de los objetivos del proyecto es continuar con la ordenación de las concesiones de veladores acometida en la primera fase del proyecto, cuando se reurbanizó la Explanada desde la Rambla hasta la Plaza del Mar.

Por otro lado, según explicó el gobierno municipal durante el anterior mandato, debido a que en el ámbito de la obra se encuentra una zona arqueológica protegida [parte del trazado de la muralla del siglo XVI, entre otros elementos, discurre por el paseo], está previsto la realización de un seguimiento arqueológico durante los trabajos sobre el terreno.

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