El Síndic de Greuges ha abierto una queja de oficio para investigar la situación en la que se encuentra Pablo Carretero, un alicantino con el máximo grado de dependencia que lleva un año sin percibir ayuda económica alguna, lo que ha condenado a su familia a destinar sus ahorros a pagar a un cuidador.

Desde la institución explican que hoy mismo han mantenido una conversación telefónica con la hija del afectado, "y mañana nos dirigiremos tanto a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas como al Ayuntamiento de Alicante para solicitarles información sobre la situación descrita. En concreto, queremos saber cuál es el procedimiento exacto que se ha seguido en esta caso y los plazos que han utilizado las dos administraciones implicadas" con el fin de conocer las posibles responsabilidades de cada una de ellas.

Las mismas fuentes señalan que reciben bastantes quejas que ponen de relieve los problemas, y las consecuentes demoras, que el procedimiento de reconocimiento y acceso a las prestaciones de la dependencia, basado en la descentralización municipal, está ocasionando.

Desde el Sindic explican que actualmente la Conselleria combina este procedimiento descentralizador (los servicios municipales llevan a cabo el registro y la valoración ) con un procedimiento centralizado a nivel autonómico. Es decir, que es la dirección general competente en la materia la responsable de supervisar y validar los expedientes, así como emitir la resolución del grado de dependencia y del programa individual de atención (PIA).