El Castillo de Santa Bárbara

Ubicada en el monte Benacantil y a 166 metros de altura sobre el nivel del mar, es una fortaleza medieval desde la que se puede divisar gran parte de la ciudad. Está formada por tres recintos de diferentes épocas levantados entre los siglos XIV y XVIII.

Plaza de Gabriel Miró

Localizada frente a la sede de Correos, razón por la que también se la conoce como "Plaza de Correos", está bien comunicada con el casco histórico y la zona comercial. Los ficus cetenarios que la rodean la convierten en un lugar imprescindible que visitar.

Explanada y Casa Carbonell

El paseo de la explanada es uno de los emblemas de la ciudad de Alicante. Está situado junto al puerto deportivo, pero lo que más destaca es el mosaico de colores rojo, blanco y azul. Aquí se encuentra también uno de los edificios más bellos, la Casa Carbonell, que se empezó a construir en 1922 y que representa una de las fachadas más imponentes de la capital de la Costa Blanca.

La Basílica de Santa María

Es la iglesia más antigua de la ciudad, fue construida sobre una mezquita islámica y data del siglo XIV. Se encuentra en el centro histórico a escasos metros del Ayuntamiento.

El Cabo de las Huertas

A lo largo de sus 13 kilómetros los visitantes pueden recorrer las calas de roca y arena y disfrutar de las aguas cristalinas de todas ellas, además de subir hasta el faro. Está situado entre las playas de San Juan y la Almadraba.