Los colegios de Infantil y Primaria están remitiendo circulares por escrito a los padres de alumnos para advertirles de la posibilidad de que el viernes no puedan dejar a sus hijos al comedor, como acostumbran a diario, a consecuencia de la convocatoria de la huelga feminista.
El problema radica, de entrada, en que el comedor escolar no figura entre los considerados por la administración como un servicio «esencial» y, por lo mismo, las empresas no están obligadas a fijar servicios mínimos de antemano entre el colectivo de los monitores, como sí ha hecho la administración con el resto de profesionales educativos, para asegurar el derecho de los niños a la educación, así como entre los sanitarios, la judicatura o el transporte público, entre otros.
El desamparo en el que pueden quedar los comedores en la jornada de mañana se recrudece entre la treintena de centros Caes de la provincia, la mitad de ellos en la ciudad de Alicante, que escolarizan a niños de familias con dificultades tanto económicas como sociales, con lo que podrían ser miles los niños afectados.
En estos colegios buena parte de los alumnos reciben a su vez el cien por cien de la beca de comedor por esas mismas circunstancias familiares, y el menú escolar se convierte, en ocasiones, en la única comida decente que hacen al día, tal y como subrayaron los directores en su día para reivindicar que se concediera a estos niños la subvención del comedor al completo, los 4,50 euros diarios.
Responsables de colegios consultados por INFORMACIÓN han mostrado una gran preocupación por el devenir de la comida escolar a consecuencia de la falta de servicios mínimos, porque además, el sector de los monitores de comedor es uno de los más feminizados, es decir que se trata de un trabajo en el que las mujeres son mayoría, y en el caso de que decidan secundar mayoritariamente los paros convocados con motivo del Día Internacional de la Mujer -de lo que no tienen por qué informar de antemano las monitoras a las empresas para las que trabajan-, los colegios no podrán asegurar el servicio del menú escolar para los niños.
«No constituyendo nuestra actividad servicio esencial, estamos exentos de la obligación de organizar servicios mínimos», indica expresamente una de estas empresas por escrito al centro educativo donde presta sus servicios.
En algunos casos son las propias empresas de comedor, contratadas por los colegios para dar este servicio, las que inicialmente han hecho saber a los responsables de cada centro educativo la problemática situación a la que se enfrentan mañana, viernes.
Pese a que de la misma forma, y por escrito, las empresas de comedor apuntan que «intentaremos ofrecer el servicio diario donde sea posible», los directores son muy conscientes de que si en comedor son mayoría las monitoras y a su vez se suman a la huelga, mañana se podrían ver «en un serio problema», como admiten. En concreto la plantilla del comedor en el colegio Isla de Tabarca, en la Zona Norte de Alicante, se podría ver muy mermada para la citada jornada.
Las clases
Sobre la jornada puramente lectiva, los servicios mínimos establecidos por Educación con motivo de la huelga tampoco tranquilizan a los responsables de los colegios en lo que se refiere a la atención a los niños más pequeños en el segundo ciclo de Infantil, de 3 a 5 años.
Los sindicatos de enseñanza se quejaron en anteriores ocasiones de que los servicios mínimos eran excesivos de cara a visibilizar las huelgas, pero en función de los que se han fijado en esta ocasión, de un maestro por cada ocho aulas en los colegios, hay directores que se echan las manos a la cabeza porque ante un seguimiento masivo del paro habría asegurados únicamente tres maestros en un centro medio de 400 alumnos. En los de Educación Especial con niños discapacitados habrá un educador por cada cinco aulas.
Los hospitales funcionarán como en un día festivo
El Consell ha establecido servicios mínimos como si de un domingo se tratara en los hospitales públicos de cara a la huelga general feminista de mañana, 8 de marzo. También trabajarán así en estos centros sanitarios los servicios centrales urgentes, quirófanos de urgencias, cocinas, mantenimiento y centralita de teléfonos. En diálisis, radioterapia, programa de trasplantes, la UCI o la unidad de reanimación se mantendrá la jornada habitual y al 50% en farmacia hospitalaria, quirófanos programados, oncología, la unidad de hospitalización a domicilio y hospital de día. En las consultas externas preferentes el servicio asegurado será del 25%. Los centros de salud y de especialidades funcionarán como los sábados, y los centros de transfusiones al 50%. En Justicia habrá un funcionario en gestión procesal y en tramitación procesal, y otro de auxilio por cada sala del TSJ, además de otro en las audiencias provinciales por cada sección. Los transportes funcionarán al 25%.
