La Conselleria de Educación, que dirige Vicent Marzà, desafía a los jueces del TSJ de la Comunidad con una nueva orden de cara al curso próximo, que en realidad calca las mismas medidas aprobadas para bajar la ratio de alumnos por aula en el curso 2017-18, que los magistrados acaban de rechazar con un fallo en contra.
La sentencia del TSJ publicada hace unos días se pronuncia en contra de la disminución del número de alumnos por aula ordenada hace dos cursos por Educación en diez localidades de la provincia y 33 en toda la Comunidad.
El argumento de los jueces se centra en que la potestad de fijar la ratio máxima del número de alumnos por aula corresponde únicamente al Gobierno central, y que una autonomía no puede arrogarse esta capacidad.
Recurso
Como la sentencia del TSJ sobre la ratio en las aulas no es firme, desde la Conselleria de Educación ya han expresado su intención de recurrirla, «porque no la compartimos», como concreta el secretario autonómico y número dos de Marzà, Miguel Soler.
Pero, además, desde el mismo departamento que dirige Marzà se ha decidido redactar una nueva orden para que el curso que viene, 2019-20, se mantengan como número máximo los 23 niños para la admisión de alumnos de tres años en todos los colegios públicos y concertados de esas mismas diez localidades de la provincia -33 en la Comunidad-.
La medida se aplicará de nuevo en todos los centros de Infantil y Primaria de Alcoy, Cocentaina, Elda, l'Alfàs del Pi, Monóvar, Novelda, Petrer, Pinoso, Villena y Xàbia.
El secretario autonómico de Educación sostiene que «el Ministerio de Educación fija una ratio máxima, que es de 25 niños por aula, y nosotros no la superamos en ningún caso con esta orden. Lo que incluimos es una mejora de la calidad de la enseñanza, tanto para el alumnado como para el profesorado, sin sobrepasar esa ratio máxima», abunda Soler.
El proyecto de orden puesto sobre la mesa ante los representantes sindicales del profesorado esta misma semana, a los pocos días de conocerse la citada sentencia en contra, viene respaldado por la Abogacía General, el Consejo Escolar Valenciano y el Consejo Jurídico Consultivo.
Los responsables de Educación descartan que se les pueda imputar desobediencia jurídica alguna porque el fallo del TSJ no es firme todavía y lo van a recurrir.
De hecho, para este curso 2018-19, rige esta misma orden de rebaja de la ratio para la admisión de niños de tres años en las citadas localidades, «y lo único que hacemos es ratificar esta medida para el curso que viene», subrayan desde Educación, a sabiendas de que también la orden de este curso ha sido recurrida y de que, probablemente, también suceda lo mismo con la que se ha aprobado para el curso que viene.
Patronal
La patronal que representa a los centros concertados, pese al respaldo de los jueces a su recurso contra la primera orden de Educación -que rebajaba en diez localidades el número máximo de alumnos a matricular con 3 años de edad, el curso pasado-, lamenta que el fallo se haya producido «con un nuevo curso en marcha», y una nueva orden en vigor que también recurrieron en su día.
Los centros concertados argumentan que tienen más demanda de alumnos y que con cada nueva orden, Educación desvía alumnado de la concertada para cubrir plazas en los centros públicos.
