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Intrusos por la acera

La venta de patinetes y otro tipo de vehículos eléctricos se ha disparado en las ciudades sin que los ayuntamientos hayan regulado su uso

Intrusos por la acera

Se usan para ir a trabajar, para desplazarse por la ciudad o por mera diversión. La venta de patines eléctricos se ha disparado en los últimos meses en la provincia, sobre todo en las grandes ciudades como Alicante. Una moda que no ha ido, de momento, acompañada, de un cambio en las normas de los ayuntamientos que regule su uso. Ante el vacío legal, estos vehículos eléctricos circulan actualmente por aceras, calles peatonales, carriles bici y calzadas, en muchos casos compartiendo espacio con el peatón, pese a que algunos modelos alcanzan velocidades de 30 kilómetros hora, lo que genera no pocas situaciones de riesgo.

Ante el aumento imparable de estos vehículos en las calles de las ciudades, la Dirección General de Tráfico emitió hace año y medio una instrucción con una serie de recomendaciones sobre las normas que deben regir para estos dispositivos eléctricos, o vehículos de movilidad personal, como los denomina. Estas recomendaciones no son de obligado cumplimiento, según recalcaron días atrás desde Tráfico, por lo que deben ser los ayuntamientos los que modifiquen sus ordenanzas para regularlos.

Según las instrucciones de la DGT, los patines eléctricos y otros dispositivos similares como los «segway», los «scooters» para personas con movilidad reducida o los monociclos tienen la consideración de vehículos y no se pueden asimilar a la figura del peatón. Por tanto, «no pueden hacer uso de las aceras y espacios reservados» a los viandantes. En este sentido, Tráfico considera que la calzada es el espacio por el que deberían circular. No obstante, deja en manos de los ayuntamientos «la autorización para circular por las aceras, zonas peatonales, parques o habilitar carriles especiales con las prohibiciones y limitaciones que considere necesarias para garantizar la seguridad de los usuarios de la vía». La DGT establece que estos vehículos no necesitan de seguro ni de permiso o licencia de circulación.

Pese a que esta instrucción se redactó hace año y medio, lo cierto es que prácticamente ningún ayuntamiento de los grandes municipios de la provincia se ha hecho eco de esta norma.

Solo el consistorio de Elda ha decidido incluir una serie de medidas para regular esta actividad en su ordenanza del año 2016. Entre ellas prohibir la circulación o estacionamiento de estos vehículos en las zonas peatonales.

En Alicante los patines eléctricos forman parte ya de la estampa de la ciudad, sobre todo en aquellas vías que conectan los barrios y las playas con el centro de la ciudad, como la Cantera, el Postiguet o Doctor Rico. Pese a ello, el Ayuntamiento aún no ha regulado su uso. Desde la Concejalía de Tráfico y Transportes del Ayuntamiento señalaron ayer que se va a iniciar el procedimiento para estudiar la regulación de este tipo de vehículos, «ya que para ello es necesario acometer la reforma o modificación de la actual Ordenanza municipal de vehículos y peatones». Asimismo, añaden, ante la complejidad de la modificación para su regulación «se va a crear una comisión técnica que va a estar compuesta por funcionarios de Tráfico, Movilidad y de la Policía Local, y se abrirá también un proceso participativo para escuchar y estudiar las aportaciones que se quieran realizar desde las diferentes asociaciones y entidades de la ciudad relacionadas con la movilidad, así como de los vecinos».

Situación en Elche

En Elche, el Ayuntamiento tampoco tiene regulación sobre los patinetes y los vehículos eléctricos todavía. No obstante, la Concejalía de Movilidad está estudiando si incluye en la ordenanza de circulación, cuya modificación está prevista para los próximos meses, una regulación específica sobre este tipo de vehículos de movilidad unipersonal. Desde el equipo de gobierno descartan que en la ciudad haya ahora mismo problemas por la proliferación de los patinetes porque su uso «no es masivo» en la ciudad. En Benidorm también se está pendiente de la modificación de la ordenanza de movilidad para incluir la regulación y control de todos estos vehículos eléctricos y prevé multas que pueden ir de los 100 a los 500 euros

En Torrevieja la ordenanza municipal de tráfico tampoco recoge una mención específica a los vehículos de movilidad personal. Y eso que su uso es muy frecuente en una ciudad con más de un 30% de personas mayores de 60 años. Por eso en la ciudad no es raro encontrar a estos vehículos circulando por todo tipo de vías. También por el centro la calzada, porque las aceras tampoco son accesibles y no todas las sillas de movilidad caben para circular por ellas. Hay mucha confusión sobre la normativa a aplicar incluso entre los agentes de la Policía Local.

Tampoco Alcoy cuenta con una ordenanza que regule la circulación de vehículos eléctricos. El tráfico en la ciudad de patinetes y bicicletas es mínimo, por lo que hasta el momento no ha sido necesario trabajar en esta línea, aunque el concejal de Movilidad, Jordi Martínez, ha insistido en que «seguimos las recomendaciones de la DGT en cuanto a velocidad y material de seguridad, como es el uso del casco». Con todo, el edil ha indicado que hasta la fecha «no se ha sancionado a ningún ciudadano por estos motivos».

Ventas al alza

Mientras, desde algunos comercios especializados de la ciudad de Alicante, explican que la demanda, sobre todo de patines eléctricos, es espectacular. El perfil del usuario es el de una persona de entre 30 o 40 años, que lo utiliza para ir a trabajar o para desplazarse por la ciudad. «Su gran ventaja es el ahorro económico, ya que no gastas en gasolina, seguros ni mantenimiento», explica Alberto Salas, de Slide Inline. Estos vehículos eléctricos alcanzan ya velocidades de entre 20 y 30 kilómetros «y permiten recorrer hasta 30 kilómetros sin necesidad de cargar la batería».

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