Una playa infinita de arenas finas y doradas, un paseo donde disfrutar en las cálidas noches de verano y una variada oferta de ocio y gastronomía. Esta versión idílica de la Playa de San Juan, punto turístico codiciado, tiene un precio. Durante el estío los dueños de apartamentos turísticos hacen el agosto. Muchas familias fijas vuelven año tras año a su apartamento de siempre y otros buscan meses antes, o a última hora, el apartamento de reposo estival frente al mar para pasar entre una a dos semanas de media.
A las puertas del verano, Alicante es uno de los destinos vacacionales preferidos por turistas nacionales y extranjeros. Y la Playa de San Juan es la más codiciada del municipio, por delante de la propia ciudad, el Cabo y la Albufereta. En primera línea de playa por un apartamento se pagan entre 1.000 euros por semana y no menos de 1.500 euros por quincena. El precio está condicionado por variantes como el estado del inmueble o si tiene urbanización y piscina. En segunda línea de la Playa de San Juan, en la avenida de Santander, los precios oscilan entre 1.200 y 1.500 por quincena, según coinciden en señalar distintas inmobiliarias y empresas del sector.
El apartamento turístico es una opción muy demandada, y de hecho, la Comunidad es el tercer destino preferido a nivel nacional en esta modalidad de alojamiento. Y es un sector que está en alza. Los apartamentos turísticos dados de alta en el último año han crecido un 17,4%. La ciudad de Alicante cuenta actualmente con 1.214 apartamentos turísticos, que supone 6.540 plazas. Las pernoctaciones de turistas extranjeros durante el primer trimestre de este año rozan el 80% y han aumentado cerca de un 30%, según los datos de la Agencia Valenciana de Turismo.
Desde la Asociación de Empresarios de Apartamentos Turísticos de la Costa Blanca, Aptur, reconocen que el sector «está en auge» y cada vez hay más empresas que se dedican al alquiler por días. Tienen asociados con sede en Alicante, la Albufereta y la Playa de San Juan. Y destacan que el turista que elige esta modalidad «tiene muy claro que quiere alojarse en un apartamento y en verano normalmente lo buscan por su cercanía a la playa donde quieren estar».
Uno de sus asociados es Mediterranea Lettings. Nuria Soriano, su responsable explica que las reservas comienzan a finales de año y que, aunque mínimas, ya tienen reservas para el verano de 2018. «Nuestra época de reservas está entre enero y marzo. Nuestros clientes son en su mayoría extranjeros, porque los españoles buscan los apartamentos a última hora y ya no quedan». Asegura que en julio y agosto «se alquila todo» y quien no llega a estar cerca de la playa se conforma con otros puntos como Alicante ciudad, destino urbano más de invierno. Por su experiencia, cuenta que aunque la Albufereta no suele ser una primera opción, «si no la conocen no la piden», quien el primer año alquila allí suele repetir porque le gusta.
En su caso, el precio que puede alcanzar un apartamento turístico de dos habitaciones en primera línea de la Playa de San Juan en julio por una semana está de media en 1.000 euros. Si hablamos de un chalé cerca de la playa para 10 personas el precio alcanza los 300 euros al día. El coste depende de variables como «la ubicación, el tipo de decoración, la capacidad. Y no ofrecemos nada donde nosotros no viviríamos».
Aunque no es comparable con el nivel de la Playa de San Juan, Soriano destaca que El Campello va a la zaga «y está bastante solicitado porque El Campello Turismo está haciendo una labor buenísima y lo están poniendo en el mapa», una promoción que considera «debería copiar Alicante».
La inmobiliaria Leo ubicada en la Playa de San Juan oferta 80 apartamentos turísticos que en mayo ya están reservados. Sus responsables explican que los turistas extranjeros que antes iban a Egipto, Europa del Este o Túnez se decantan ahora por Alicante. Los nacionales están liderados por turistas de Madrid y Castilla La Mancha. Y es un turista fiel.
La línea del tranvía desde Avenida de las Naciones es el límite de la mayoría de clientes para buscar un piso en la Playa de San Juan. A medida que los apartamentos más interesantes se ocupan los turistas van eligiendo allí donde quedan y se van alejando de la playa. En julio y agosto «se alquila todo». Y la zona de Miriam Blasco por quince días de verano en una urbanización con piscina cuesta 1.150 euros.
La previsión es fundamental para lograr el apartamento turístico ideal para el verano. Los extranjeros son, con diferencia, los más madrugadores y en diciembre arrancan las reservas. El turista inglés es el más previsor y ello se corresponde con las cifras, un 45% de los viajeros que pernoctan en apartamentos turísticos son británicos. Nórdicos, escandinavos y alemanes reservan entre febrero y marzo y los franceses suelen hacerlo en abril y mayo.
Las empresas que se dedican al alquiler están muy especializada. De hecho, en algunas inmobiliarias alicantinas reconocen que no les compensa tener apartamentos turísticos. «Muchos propietarios no los quieren declarar. Es necesario hacer algo de papeleo, como el certificado energético, el de turismo. Y los dueños no quieren pagar aunque sea poco y se mueven por plataformas turísticas en internet donde sacan más provecho».
Para la secretaria general de Hosbec, la asociación de hoteles de la Costa Blanca, radicada en Benidorm, Nuria Montes, los apartamentos turísticos sin reglar y en concreto los que se promocionan por internet «son una amenaza para el sector turístico. Con las nuevas tecnologías se alquila a golpe de clic con las mismas condiciones que un hotel, con servicios adicionales, incluso comidas y transporte», advierte. Montes explica que la oferta de alojamientos en vivienda supera ya la de los alojamientos reglados de hoteles, camping y apartamentos».
En el sector de apartamentos turísticos advierten de que «los propietarios pagan sus impuestos. Facturamos con IVA» y piden que se persiga a aquellos que no pagan impuestos. «No admitimos pagos en mano, porque el pago es una huella», cuenta Nuria Soriano.
