«La aprobación del decreto del Ayuntamiento de Alicante sobre el horario de los auxiliares de servicios de centros escolares -los conserjes- es contraria a la ley de Educación vigente, LOE; a la ley de Bases de Régimen Local; y al decreto del Consell que regula la jornada continua escolar». La advertencia que la Conselleria de Educación ha remitido por escrito a la alcaldía de Alicante, expresa sin ambages la ilegalidad de la decisión del alcalde, Gabriel Echávarri, que ha cambiado el horario de los conserjes y ya no cierran los colegios desde el pasado 1 de diciembre.

Con la intención de adaptar el horario de los conserjes a la jornada continua de los colegios, y a petición de los sindicatos de los bedeles, Echávarri ha provocado un serio conflicto en los colegios. «Defenderé a mis trabajadores», dijo el alcalde en su momento, dispuesto a aceptar la reivindicación de la jornada continua para los conserjes como la tienen los docentes. Lo cumplió, y desde el 1 de diciembre los bedeles van a de 8.00 a 15.30 horas por lo que no están a las 17.00 para cerrar.

Sin embargo el Consell, a través de la dirección general de Política Educativa, que a su vez solicitó a los Servicios Jurídicos de la Generalitat un informe detallado al respecto, le hace saber al alcalde que «el cambio de jornada afecta a la prestación de servicios por el personal docente, pero en ningún caso al desarrollo de las funciones de vigilancia, conservación y mantenimiento de los edificios municipales destinados a centros públicos de Preescolar y Educación Primaria», que son las que corresponden a los conserjes.

El referido informe jurídico desgrana a su vez todos los artículos que incumple la decisión municipal: el 27 de la Constitución sobre el derecho fundamental a la Educación; el 8 de la LOE que señala que la conservación, mantenimiento y vigilancia de los edificios destinados a centros públicos de Infantil Primaria y Educación Especial corresponden al municipio respectivo; el 53.1 del Estatuto de Autonomía de la Comunidad sobre la exclusiva competencia de la Generalitat en la regulación y administración de la enseñanza en toda su extensión y para asegurar su cumplimiento; el 25.2 de la Ley de Régimen Local sobre las competencias propias del municipio en el mantenimiento y vigilancia de los centros escolares; y el 2 de la orden de Educación sobre la jornada continua que debe garantizar la atención de los alumnos en horario no lectivo, en cooperación con el ayuntamiento, y permanecer abierto desde las 9.00 horas hasta las 17.00 horas.

El conflicto provocado en los centros escolares por la ausencia de los conserjes a las 17.00 horas genera a su vez la intranquilidad de los padres de alumnos. El control a la salida de los niños ya no es el mismo y culpan al alcalde de «castigar» a los que han elegido la jornada continua, como expresa la presidenta de la AMPA de uno de estos colegios, el Joaquín Sorolla.

De los 52 centros de Infantil y Primaria de Alicante, 42 han obtenido el cambio de horario y en cada uno están procediendo de una forma para cerrar el centro. En la mayoría son los monitores de las extraescolares o los profesores de guardia los que echan la llave.