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El Ayuntamiento considera insostenible el coste público del plan del macrocentro

La alegación municipal planteará cambios en la gestión y el modelo del parque de las Lagunas así como reducir los espacios dotacionales para viabilizar el mantenimiento

El Ayuntamiento considera insostenible el coste público del plan del macrocentro

Los informes técnicos elaborados por el Ayuntamiento de Alicante que hoy se aprobarán en la Junta de Gobierno Local para sustentar la alegación municipal contra el macrocentro comercial en Rabasa concluyen que el proyecto, tal y como está planteado por Alicante Avanza, resulta insostenible económicamente para la hacienda municipalresulta insostenible económicamente , sobre todo por los costes de mantenimiento que generaría el parque público metropolitano de las Lagunas de Rabasa, que ocuparía una superficie de un millón de metros cuadrados.

Así se desprende del análisis económico realizado por los técnicos municipales, en el que se apunta que para viabilizar la actuación para las arcas municipales sería necesario otro tipo de gestión del parque de las Lagunas de Rabasa, modificar las frecuencias de paso del transporte público así como reducir la superficie dotacional que contempla el proyecto para jardines, zonas deportivas o viarios (suma otros 837.000 metros cuadrados) cuyo mantenimiento tendría una repercusión directa sobre la hacienda local. Los técnicos consideran que sólo con esas modificaciones el proyecto, tramitado como Actuación Territorial Estratégica, podría ser viable para las arcas municipales, pero entienden que si la actuación se ejecutara tal y como está planteada los costes de mantenimiento para el Ayuntamiento serían insostenibles.

En esa línea, informes como el de Atención Urbana plantean alternativas de gestión para el parque de las Lagunas. Como avanzó este diario, la concejalía de Medio Ambiente también cuestiona los datos del informe de sostenibilidad económica que presenta Alicante Avanza según el cual la actuación sería rentable para el Ayuntamiento y se propone cambiar el planteamiento del parque de las Lagunas, para que pase a tener un carácter agrícola-forestal, lo que abarataría los costes de mantenimiento. Se llega a plantear, incluso, la posibilidad de que un porcentaje de los ingresos que genere el desarrollo del ATE repercutan en el mantenimiento del parque público.

Estas son algunas de las cuestiones que se recogen en los informes municipales que hoy se aprobarán en la Junta de Gobierno Local y que se concretarán en las alegaciones municipales al proyecto. En ellos, se pone de manifiesto que los compromisos del promotor la mercantil participada por Enrique Ortiz no sólo se refieren a las obras de urbanización, también a las de ejecución de la edificación y que la documentación aportada, que se encuentra expuesta al público, resulta insuficiente. Igualmente, se entiende que no se cumple con todos los requisitos impuestos por el Consell en el informe de compatibilidad que emitió cuando aprobó el ATE en junio de 2014.

A estos informes se suman los de diferentes áreas, como Tráfico y Transportes, Urbanismo o Comercio. Sobre este último, este diario ya avanzó que recoge que el proyecto generará un «profundo desequilibrio entre el comercio urbano y el de la periferia» y además supone «un ataque directo al modelo de ciudad». Algo que, según los técnicos, puede provocar «el vaciamiento del comercio y de la vida del centro y de los barrios». Un fenómeno que definen como «desertización de los centros urbanos».

Ayer la promotora Alicante Avanza se reunió con representantes de Compromís, que le trasladaron su postura en contra del macrocentro por las desigualdades urbanísticas y comerciales que generaría. El candidato de Compromís, Natxo Bellido, pidió la retirada del ATE por considerarlo «un plan Rabasa dos» y por estar «bajo una sombra de sospecha».

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