La fórmula del distrito único escolar arbitrada por la Conselleria de Educación bajo la premisa de favorecer la libertad de elección de centro independientemente de la cercanía del domicilio al centro educativo, empieza a generar descompensaciones de matricula entre unos centroS y otro, con graves consecuencias para los que ven cerrar aulas de Infantil desde hace dos años, lo que les condena al cierre definitivo de seguir esta peligrosa tónica.
Colegios como Prácticas-La Aneja, en la zona de San Blas alto; Emilio Varela en Virgen del Remedio; o Mora Puchol en La Florida-Benalúa, hacen denodados esfuerzos por tratar de salvar la matrícula en sus aulas organizando actividades extra y jornadas de puertas abiertas que den a conocer la altura de su nivel y compromiso educativo.
Este año, como el anterior, Educación les ha colocado el menos uno (-1) en la casilla de las aulas de Infantil, lo que les sitúa en la cuerda floja en caso de mantenerse las actuales ratios de 30 alumnos por aula, a pesar del descenso, también, de la natalidad.
Demanda
Por contra, en la zona de playas, la misma conselleria se ha visto obligada a arañar espacios comunes en colegios sin más posibilidad para aumentar aulas, a consecuencia del exceso de demanda de plazas escolares para los más pequeños.
Los colegios Voramar y Mediterráneo -este último recién creado, ya se ha quedado pequeño-, incorporarán espacios de la biblioteca o de la sala de usos múltiples para conseguir dos nuevas aulas donde acoger más alumnos de Primaria y de Educación Especial.
También el colegio La Almadraba, que comparte instalaciones con el Instituto Radio Exterior, verá incrementado el volumen de alumnado de modo singular, puesto que añadirá asimismo cuatro aulas para los niños de Infantil, y otras cuatro para el nivel de Primaria. Son ocho aulas de golpe, casi el doble de las ahora mismo existentes, para poder incorporar la demanda de plazas escolares en una zona con todos los colegios hasta arriba y sin visos de construir ninguno nuevo.
En su día la Concejalía de Educación incluso decidió prescindir de la posibilidad que ofreció el Consell de construir uno de los nuevos colegios CIS, concertados de iniciativa social, en la playa, por entender que existe suficiente margen con el aprovechamiento de los espacios existentes, teniendo en cuenta que en los últimos años la natalidad desciende ligeramente.
El edil de Educación, Antonio Ardid, insiste en que la distribución del alumnado es adecuada y que el devenir de los centros lo marcarán las familias con sus preferencias: los hay a los que quiere ir todo el mundo y al resto acuden cuando se ven sin posibilidades, pero la natalidad sigue bajando, apunta el concejal. Calcula que este próximo curso la demanda de plazas de niños de 3 años descenderá en varios centenares y que la oferta de 3.500 vacantes será más que suficiente para la demanda global.
Actividades
Jornadas para captar alumnos
En las faldas del Monte Tossal, el colegio de Prácticas-La Aneja implica a su alumnado en actividades como el Día de La Paz, y organiza jornadas de puertas abiertas para dar a conocer a las familias la calidad de la enseñanza y atención que prestan a sus alumnos.
LAS CIFRAS
12 AULAS
La zona de playas requiere arañar espacios para acoger más niños
Los colegios de la playa de San Juan siguen necesitando, un año más, prescindir de espacios comunes como la biblioteca o la sala de usos múltiples para crear aulas donde no hay, a consecuencia del aumento de la demanda de matrícula.
3 AULAS
Colegios sin suficiente matrícula ven cerrar clases año tras año
La falta de matrícula suficiente para conformar un aula de 30 niños en determinados colegios de la ciudad, los sitúa en la cuerda floja en un futuro a consecuencia del progresivo cierre de aulas por parte de Educación. Padres y docentes se implican en actividades extra para dar a conocer su nivel y aumentar el alumnado.
