Varios operarios del cementerio municipal de Alicante iniciaron esta mañana las labores de exhumación, en una fosa común, de cinco presuntos bebés robados entre las décadas de 1960 y 1980, las primeras que se realizan en la Comunitat Valenciana.

Ante la presencia del fiscal de Menores de Alicante, Carlos Ferreiros, y varias familias, que han denunciado supuestos casos de bebés robados, comenzó la exhumación del primero de los cinco cuerpos en una fosa común situada en el cuadrante 12 del cementerio alicantino, según informa Efe.

Una vez que se exhumen los restos mortales está previsto comparar muestras de ADN para cotejarlos con los familiares denunciantes y tratar de esclarecer los supuestos casos.

Desde las 9 de la mañana se procedió a la primera apertura de fosas para intentar localizar el área de tumba donde supuestamente está enterrada una niña nacida en el Hospital General de Alicante en 1972.

Los operarios trataron de localizar, en primer lugar, los restos mortales de la hermana melliza de una de las denunciantes, María José Picó.

Un forense está embolsando todos los restos hallados para luego practicar la prueba del ADN.

La exhumación ha sido seguida por familiares afectados y concretamente ésta por el padre de la niña enterrada, que dio instrucciones sobre la zona exacta en la que dejó la caja.

Los trabajos han sacado a la luz los restos de una caja de madera y huesos de un neonato que tendrán que ser analizados para confirmar si su ADN es coincidente con el de los familiares que han denunciado el caso.

Tras más de cinco horas de trabajos, se ha descubierto la impronta de la caja en la que supuestamente fue enterrada, así como restos de madera muy deteriorados. Poco después, se han localizado huesos de un tamaño correspondiente a un bebé, principalmente de la bóveda del cráneo.

El principal problema de la investigación es que personal del cementerio corrobora que en esta fosa común hay enterrados niños, miembros de cuerpos, así como algún adulto.

Se trata de las primeras exhumaciones que se llevarán a cabo en toda la Comunidad Valenciana en el marco de las investigaciones por los supuestos robos de bebés en los hospitales del territorio autonómico.

Según aseguró recientemente la portavoz de la Asociación de Afectados por las Adopciones Irregulares (Anadir) en Alicante, sólo de marzo a diciembre del año 1962 se contabilizan un total de 483 bebés enterrados en el cementerio de Alicante.

Aplazamiento

La Fiscalía de Menores ha aplazado para otra fecha la búsqueda en el cementerio municipal de Alicante de los otros cuatro restos mortales que supuestamente corresponden a bebés robados, ya que las labores de localización del primero se prolongaron durante toda la mañana.

Así lo ha explicado a los periodistas el fiscal de Menores de Alicante, Carlos Ferreiros, quien ha precisado que hoy sólo se han buscado los restos mortales de la hermana melliza de una de las denunciantes, María José Picó, nacida el 28 de marzo de 1972 en el Hospital General de Alicante.

Aunque en un principio se esperaba localizar los restos mortales de Picó en una hora, los trabajos de exhumación, iniciados a las 9.25 horas, se prolongaron hasta la hora de comer, lo que ha llevado al fiscal a aplazar a otra fecha las cuatro exhumaciones restantes.

Familias que han denunciado supuestos casos de bebés robados han seguido las labores de exhumación, junto a varias decenas de medios de comunicación y una decena de equipos de televisión, como France Presse.

En estos trabajos se ha levantado incluso parte de la acera colindante a la parcela del cementerio municipal donde se llevan a cabo las exhumaciones, ya que fue construida posteriormente.

Según el presidente de la Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares, Antonio Barroso, hasta ahora ha habido once exhumaciones de presuntos bebés robados en España (País Vasco, Cádiz y Barcelona).

A falta de dos casos en Barcelona, en el resto se hallaron las tumbas vacías sin encontrarse los restos supuestamente sepultados, ha indicado Barroso.