El Consejo Escolar Municipal de Castalla ha decidido solicitar a la Conselleria de Educación la construcción de un nuevo colegio que cubra las necesidades del municipio en Infantil y Primaria. La Generalitat, en este sentido, ha iniciado el derribo del edificio del Rico Sapena -único centro público de la población que cubre dichas etapas educativas- desalojado hace cinco años por sus deficiencias estructurales.
Castalla sólo cuenta con un colegio público que oferte Infantil y Primaria, el Rico Sapena, y las deficiencias estructurales halladas por los técnicos de la Conselleria de Educación en uno de sus edificios provocaron en octubre de 2010 el desalojo de los alumnos de cuarto, quinto y sexto de Primaria. En un primer momento, los escolares fueron repartidos entre el restos de inmuebles y en dos locales comerciales ubicados junto al centro y, posteriormente, la Generalitat instaló aulas prefabricadas, donde continúan asistiendo a sus clases habituales.
Si bien la demolición del edificio afectado estaba previsto que empezase hace justo ahora un año, según anunció la exconsellera de Educación, María José Català, finalmente los trabajos se han iniciado esta semana.
Ayer, los trabajadores de la empresa encargada del derribo retiraban parte de los escombros y aún les quedaba por completar la demolición de una pequeña parte del edificio.
Asimismo, el alcalde de Castalla, Antonio Bernabeu, explicó que durante la última reunión del Consejo Escolar Municipal se ha acordado solicitar a la Conselleria de Educación la construcción de un nuevo colegio que cubra las necesidades de Infantil y Primaria en la localidad, ya que el Rico Sapena «se encuentra saturado, al ser el único centro público que hay en la población».
Esta medida serviría para «descongestionar el Rico Sapena», aseguró el primer edil, quien también confirmó que por el momento el Consell no llevará a cabo ninguna otra actuación en el centro, salvo la limpieza de la zona en la que se está llevando a cabo el derribo del edificio en cuestión.
Bernabeu, además, informó que para presentar la propuesta a la Generalitat el Ayuntamiento va a poner a disposición un solar de propiedad municipal situado en la zona de la Llauria. «Creemos que esa sería una buena ubicación», hizo hincapié el alcalde.
Con todo, el primer edil es consciente de que el proceso es costoso y lento, aunque «ya estamos trabajando en la tramitación de la solicitud», según confirmó en declaraciones a este diario.
Mientras tanto, los alumnos de cuarto, quinto y sexto de Primaria continuarán el próximo curso académico en aulas prefabricadas, ya que el Rico Sapena no dispone de espacio suficiente para albergar a todos los escolares. Cabe recordar que uno de los edificios alberga Infantil y el otro -donde se encuentran también los despachos- a los alumnos de primero, segundo y tercero de Primaria.
