Los acuíferos que abastecen a Alcoy han empezado a descender después de siete años de dinámica positiva. La prolongada sequía sequía está haciendo mella en las reservas hídricas, hasta el punto que los bombas de extracción del Molinar tendrán que activarse después del verano de persistir la actual falta de lluvias. Los manantiales del Barranc del Cint y Barxell también están retrocediendo.
Los acuíferos de Alcoy estaban atravesando por una situación óptima óptima, después de prácticamente tocar fondo a principios de la pasada década. Una muestra de ello es el comportamiento experimentado por el Molinar, principal acuífero que abastece a Alcoy, cuyo nivel de captación de aguas se encontraba en 2002 casi a 40 metros de profundidad. La situación mejoró de forma progresiva hasta 2005, cuando de nuevo se registró un descenso. Sin embargo, desde 2007 las reservas hídricas han ido al alza, pasando de una profundidad de captación de 38 metros a los apenas 4 en que se ha ido moviendo desde 2009 hasta la actualidad. La evolución de los acuíferos del Barranc del Cint y Barxell ha sido similar, aunque con oscilaciones menos acusadas.
A la hora de encontrar una explicación a la buena evolución de los manantiales alcoyanos en los últimos siete años hay que hacer referencia al generoso ciclo de lluvias registrado en esta época, y también a la crisis, que ha propiciado un acusado descenso de la actividad económica y más en concreto en las denominadas empresas textiles del ramo del agua, grandes consumidoras de recursos hídricos.
Sin embargo, la persistente sequía que se viene registrando -prácticamente no ha llovido desde el inicio del año-, está empezando a hacer mella en los manantiales.
El acuífero del Molinar cuenta en la actualidad con una profundidad de captación de 5,20 metros, uno más que a principios de año, y todo parece indicar que será necesario activar las bombas de extracción después del verano. Así lo señaló el concejal de Medio Ambiente, Paco Agulló, quien también destacaba que este hecho propiciará un incremento del consumo eléctrico y, por tanto, unos mayores costes de extracción. Hay que señalar, en este sentido, que el agua mana caballera en este manantial hasta los 5,50 metros de profundidad. Una vez se alcanza esta cota, es necesaria la extracción por medios mecánicos.
En lo que respecta a los otros dos manantiales, el Barranc del Cint cuenta en estos momentos con una profundidad de captación de 68 metros, cuando el pasado mes de mayo era de 65.
La captación del manantial de Barxell, por su parte, se sitúa en 42 metros. En este caso las variaciones respecto a los meses precendentes han sido menores.
