El proceso para fijar el planeamiento del municipio en los próximos 20 años está en fase inicial tanto en la tramitación como en la redacción; pero tras ocho meses de reuniones, los grupos políticos ya tienen puntos de acuerdo en el documento inicial estratégico del Plan General Estructural de San Vicente redactado por técnicos municipales.

El Plan Estructural prevé un crecimiento de 8.263 viviendas en los próximos 20 años, según explica la concejala de Urbanismo, Mariló Jordá. San Vicente contará en 20 años con un total de 34.781 viviendas. El borrador del plan estructural contempla una clasificación de los suelos «estrictamente necesarios» para satisfacer las demandas residenciales y productivas del municipio. La edil explica que esta previsión servirá para abastecer una población potencial según el crecimiento demográfico más la población flotante de 86.953 habitantes, unas 30.000 personas más.

Tras ocho sesiones de trabajo, el gabinete del Plan General ha acordado mantener todas las unidades de ejecución de suelo urbano, tanto en el casco urbano como en el diseminado que se preveían en el anterior plan de los años 90'.

Uno de los escollos que los grupos han acordado resolver se refiere a la Cañada Real que pasa por el municipio. Según explica Jordá, los grupos han acordado «impulsar un expediente que cuestiona la Cañada Real». La Conselleria advierte de que dicha cañada es de 75 metros, lo que afectaría a decenas de propietarios.

Uno de los objetivos del Plan Estructural es la integración cada vez mayor del casco urbano con la Universidad. Para ello, uno de los puntos es la conversión progresiva del suelo industrial del polígono Torregroses en suelo residencial, dotacional y terciario.

Se desclasifica el sector del Sabinar, donde el anterior Plan preveía la construcción de un campo de golf y el crecimiento urbanístico, para ser ahora suelo no urbanizable. A su vez, se apuesta por la generación de suelo industrial en la zona de Inmediaciones para acoger un parque industrial comarcal de innovación ligado a la puesta en valor del conjunto de La Cementera.

Apuesta por el núcleo urbano

El objetivo del nuevo Plan General es «proponer un modelo de crecimiento compacto que remate la ciudad existente, la vertebre con su entorno inmediato y la dote de un carácter basado en las sinergias que la Universidad proporciona», señala Jordá. Quien apunta que San Vicente pretende ser sinónimo de ciudad universitaria, con un modelo residencial que acompañe a este modelo de ciudad, desligado del disperso y relacionado con la ciudad diversa y polifuncional y compacta.

Para lograr esos objetivos, el documento contempla seis líneas estratégicas: creación del Parque de la Innovación junto a la Universidad y su Parque Científico; ampliación del polígono Canastell, integración de la Universidad en la ciudad; redefinición de los sectores residenciales; creación de cinturones verdes y rotacionales y mejora de la sostenibilidad urbana y medioambiental del diseminado.