Las lluvias registradas durante el último mes han vuelto a agravar la situación por la aparición de lixiviados en La Murada, llegando esta vez a diversas fincas agrícolas. El líquido procedente de la descomposición de la basura se ha filtrado al parecer desde los vasos del vertedero de Proambiente -ahora sin actividad- agravando la contaminación que afecta a esta pedanía de Orihuela.
INFORMACIÓN visitó ayer algunos de los terrenos afectados junto a miembros de la asociación Vertivega. Los ecologistas mostraron diversos puntos en los que se acumulan litros y litros de este líquido contaminante que se extiende hasta prácticamente la zona en la que se ubican las casas de La Murada, en un perímetro de cerca de cinco kilómetros. El colectivo ha pedido a la Dirección General de Calidad Ambiental de la Generalitat que intervenga para retirarlos. Lo cierto es que no es la primera vez que se realiza ese trabajo. En diciembre de 2015 ya se extrajeron más de 115.000 litros que fueron derivados hasta la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Crevillent. Ahora, tras los últimos episodios de lluvia, se ha repetido esa misma situación y el director de Calidad Ambiental de la Generalitat, Joan Piquer, señaló que se volverá a repetir el trabajo, que se realiza mediante largos tubos aspiradores conectados a un camión.
Según los ecologistas de Vertivega, el líquido procede de los vasos del vertedero, unas instalaciones que están en suelo murciano. La planta de residuos se ubica entre Abanilla y Orihuela. De hecho, también en diciembre de 2015 los técnicos de la Generalitat determinaron igualmente que el líquido procedía del citado vertedero y apuntaron que se encontraban más o menos diluidos en función del riego de las parcelas de cultivo colindantes.
Desde Vertivega, además de pedir a la Generalitat que actúe lo antes posible, solicitaron que se exija al ejecutivo murciano que tome medidas para que no se siga extendiendo el líquido contaminante disponiendo, por ejemplo, barreras de grava o arena en torno al perímetro del vertedero.
Mientras tanto, operarios de una empresa especializada en trabajos geotécnicos desplegaron ayer un operativo en La Murada para hacer catas en diferentes partes del terreno. El trabajo consiste en extraer muestras de tierra en puntos de hasta 20 metros de profundidad para luego ser derivadas a un laboratorio y determinar si está contaminada.
Esta operación está relacionada con el enterramiento de miles de toneladas de basura que se ha realizado durante años en terrenos cercanos al vertedero de Proambiente. Los desechos se depositaron en zanjas cavadas en la tierra sin ningún tipo de tratamiento previo. Desde residuos sanitarios, hasta plásticos o pilas que se pueden apreciar a simple vista en fincas sobre las que después se plantaron limoneros. Vertivega ha pedido en diversas ocasiones que se prohíba la comercialización de esos limones.
