En torno a cuarenta alumnos y profesores de la Escuela de Formación de Alumnos de Torrevieja han protagonizado esta mañana una protesta a las puertas del centro para reclamar la dimisión del director de este centro, donde cursan estudios en distintas disciplinas, unos 600 alumnos. Los alumnos y docentes han coreado lemas para reclamar la dimisión, como responsable de supuestas irregularidades contables, además de colocar una pancarta y carteles reclamando esa destitución.

La mayoría del claustro, nueve de once docentes, ha rubricado una denuncia en los juzgados sobre irregularidades contables en las que se señala al director por, supuestamente, consentirlas, y a un profesor, adscrito a la plantilla de trabajadores del Ayuntamiento, como autor.

En concreto, la denuncia asegura que durante muchos años y hasta hace dos cursos, todos los alumnos aportaban, junto a los papeles de la matrícula una cuota de hasta 20 euros anuales, que se asignaba a la Asociación de Alumnos. El dinero recaudado mediante esa fórmula, más de 80.000 euros en el periodo denunciado, no cuenta con un reflejo contable en las cuentas del centro. También que el citado profesor gestionaba una máquina expendedora de bebidas, de la que obtenía los ingresos, que se realizaban clases particulares dentro del centro, y que una docente, firmante ahora de la denuncia, ha estado trabajando "en negro" desde principios de los años noventa. De la denuncia tiene constancia la Conselleria. La protesta se repite esta tarde, aunque la dirección ha reclamado a los convocantes que retiraran los carteles de la valla del centro. Las misma denuncia asegura que esos hechos se han hecho bajo el amparo del nombre de la Asociación de Alumnos, que sin embargo, estaba controlada por el profesor.

La dirección del centro ha explicado hoy a INFORMACIÓN que todas los hechos de los que se habla en la denuncia corresponden, en caso de se demostraran irregularidades, a gestiones realizadas exclusivamente por esa Asociación de Alumnos, que en el caso de la Escuela de Formación, está gestionada por adultos y no menores de edad, y que los directores de estos centros no tienen competencias para gestionarla, ni conocer sus cuentas, ni funcionamiento interno.

La dirección explicó que es cierto que los profesores tramitan las matrículas por la falta de personal auxiliar para ello -algo que ocurre en otros tantos centros educativos de las mismas características y desde hace años- y que en ese proceso, antes de que dejara de pedir la cuota de la Asociación, llegaron a manejar pequeñas cantidades de dinero que aportaban los alumnos y que se ingresaba inmediatamente en la cuenta de la Asociación. También dijo que tanto la explotación de la máquina de refrescos, cuya instalación y reciente retirada fue comunicada a la Conselleria, como otras situaciones se refieren a la gestión de la citada asociación.